Los reyes de Dinamarca han viajado este martes a Letonia, primera parada de un recorrido por el Mar Báltico que les llevará, después, a Estonia y Lituania. Esta mañana, Mary de Dinamarca ha deslumbrado en Riga, la capital, con joyas de hace 200 años, pero esta noche, en el banquete de gala organizado por el presidente del país, Edgars Rinkēvičs, se ha superado. La esposa del rey Federico ha rescatado dos piezas clave de su armario: la tiara que compró en una subasta y un vestido con guiño al país que la ha recibido con tantos honores.
Su vestido con 'escote mariposa' y guiño a Letonia
Para acudir a esta gran cena en el Castillo de Riga, la reina danesa ha recuperado el vestido de noche que llevó en el tradicional Banquete de Año Nuevo de 2018. En esa cita, lució este precioso diseño con cuerpo estructurado, manga corta y falda en línea "A" . El vestido destaca gracias a un favorecedor escote Bardot con abertura central -una forma que recuerda a las alas de la mariposa- y por su intenso tono rojo carmín, un color que Mary ha llevado en muy contadas galas como esta (suele preferir diseños blancos, azules o negros).
Sin embargo, la elección de un vestido rojo no es, para nada, casual: es el color de la bandera de Letonia, con lo que aparecer enfundada en él es un bonito homenaje de la reina danesa hacia el país que visita. Un ejemplo más de cómo las royals utilizan la moda para lanzar mensajes, y también un recurso habitual entre reinas y princesas, quienes muchas veces se visten en la gama cromática propia del lugar al que acuden.
La tiara que compró una subasta
Para acompañar el vestido carmesí, Mary de Dinamarca no ha abierto el joyero heredado para sacar las joyas históricas de la Familia Real, como sí ha hecho esta mañana, sino que ha preferido escoger una pieza que ella misma compró. Nos referimos a la increíble tiara de estilo eduardiano con diamantes, rubíes y espinelas que compró en mayo de 2012 en la casa de subastas danesa Bruun Rasmussen.
Esta tiara estilo diadema puede llevarse sobre el pelo recogido o casi suelto, como Mary lo ha lucido hoy. Su melena queda retirada del rostro gracias a la joya. Así, hemos podido descubrir también los pendientes a juego de la tiara, además de una pulsera con diamantes, varios anillos, un clutch de terciopelo burdeos y la Gran Cruz de la Orden de las Tres Estrellas letona que ha recibido esta mañana.









