El blanco se ha convertido en el color más poderoso del armario diplomático. Esta semana lo hemos visto brillar en escenarios muy distintos (Nueva York, Luxor y Madrid) de la mano de tres mujeres con estilos y roles diferentes, pero unidas por un mismo lenguaje de moda: Melania Trump, la reina Letizia y su hermana Telma Ortiz.
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© Getty ImagesLa primera dama de los Estados Unidos ha acompañado al presidente Donald Trump a la 80ª Asamblea General de la ONU en Nueva York, donde ha optado por un estilismo sobrio y cargado de significado: un traje blanco de dos piezas, de blazer entallada y pantalón recto, que ha combinado con un top fluido beige. Una elección que no ha pasado desapercibida, pues el traje blanco es uno de los looks más recurrentes de la realeza. Con este gesto, Melania podría haber querido rendir un elegante guiño a la reina Letizia y otras royals que, en numerosas ocasiones, han apostado por este conjunto monocromático como símbolo de transparencia, pureza y liderazgo.
© Getty ImagesLa elección de Melania llega, además, tras su reciente visita de Estado al Reino Unido, donde deslumbró tanto en la cena de gala en Windsor como en su jornada de actividades con la princesa Kate en Frogmore House. La primera dama demuestra en cualquier ocasión que su estilo no es casual: es estrategia y diplomacia en clave de moda.
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© Getty ImagesEl uniforme femenino que une a primeras damas y 'royals'
Esta misma semana, en Egipto, durante la inauguración de la nueva iluminación del templo de Hatshepsut, en Luxor, la reina Letizia confirmaba que el traje blanco es el mejor uniforme diplomático, versátil y atemporal. La Reina recurrió a uno de Mango compuesto por blazer de solapas y pantalón acampanado, que combinó con un top lencero a juego.
© GTRESUna elección impecable para un protocolo complejo resuelto con maestría gracias a un calzado cómodo pero elegante: alpargatas doradas de cuña a juego con un clutch de Magrit. El conjunto se completó con joyas españolas: unos pendientes de Isabel Guarch.
El vínculo entre Letizia y el traje blanco no es nuevo: lo estrenó en 2003, en el anuncio de su compromiso con Felipe VI, y lo ha convertido en un sello personal que incluso ha transmitido a la princesa Leonor. Cada nueva versión reafirma su vigencia y lo confirma como un uniforme regio para ocasiones especiales.
© GTRESEn Madrid, la hermana de la Reina, Telma Ortiz, también ha apostado esta semana por el mismo look para asistir en calidad de ponente a la inauguración del Festival Centroamérica Cuenta. Fiel a su estilo discreto, ha escogido un traje de lino blanco de tres piezas. Un look que la alinea no solo con su hermana, sino también con la tendencia global entre primeras damas y royals. Lo ha combinado con mules transparentes y unos pendientes de diamantes. Un estilismo funcional, elegante y sin artificios, perfecto para reforzar su imagen profesional.
© Getty ImagesDe Nueva York a Luxor y Madrid: tres mujeres, tres estilos y un mismo mensaje. El traje blanco es mucho más que una tendencia, es un look versátil y atemporal que se puede ajustar a distintas personalidades pero que, ante todo, siempre consigue transmitir elegancia, sobriedad, limpieza, autoridad, luz y frescura.
