Vacunas, desparasitaciones y otras revisiones para tu perro
Te ofrecemos un calendario vacuna, de desparasitaciones y otras revisiones para que puedas controlar mejor la cartilla sanitaria de tu perro
La prevención es siempre mucho mejor que el tratamiento. Por eso, es importante que establezcamos un calendario de vacunas y desparasitaciones, así como visitas a nuestro veterinario para proteger la salud de nuestras mascotas. Por ejemplo, se recomienda la desparasitación interna y externa de nuestro animal de compañía cuatro veces al año, coincidiendo con las diferentes estaciones. Estas nos ayudarán a luchar contra garrapatas, pulgas, flebotomos y mosquitos susceptibles de transmitir enfermedades que pueden acabar siendo letales.
En cuanto a las vacunas, es otra manera eficaz de proteger a nuestras mascotas de enfermedades contagiosas graves que pueden tener consecuencias fatales. Consiste en introducir en el organismo una dosis mínima del agente patógeno que causa la enfermedad, de manera que el sistema inmune sea capaz de reconocerlo y combatirlo en caso de contagio. Algunas de las enfermedades que pueden prevenirse con las vacunas son:
- Rabia
- Moquillo
- Parvovirosis
- Hepatitis
- Leptospirosis
- Tos de las perreras
No todas son obligatorias y, de hecho, el protocolo de administración varía en cada comunidad autonóma.
De la mano de los expertos de las clínicas veterinarias Kivet, colaboradores de Kiwoko, repasamos cuáles son los controles que debes hacer a tu perro a lo largo del año.
Enero: chequeo general
Tras los excesos navideños que, probablemente, también habrán afectado a nuestras mascotas, es hora de acudir al veterinario para realizar un chequeo. De esta manera, al igual que los humanos, se empezará el año con 'buena pata'. En esta revisión, el especialista escuchará sus latidos, su respiración, chequeará cómo están sus reflejos y si tiene síntomas de algún problema neurológico. Si lo ve oportuno, recomendará realizar análisis de sangre.
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Febrero: primera desparasitación anual
Los parásitos también están presentes en invierno, por ello, apunta en tu agenda aplicar una de las cuatro desparasitaciones internas que se recomiendan hacer a lo largo del año. De esta manera, conseguiremos mantenerlos protegidos tanto en las épocas de calor como en las de frío. Recuerda que los parásitos internos no solo son un peligro para tu mascota. También constituyen un riesgo para ti y para los más pequeños de la casa.
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Marzo: revisión dental
Marzo puede ser un buen mes para realizar un chequeo dental. Estas revisiones son fundamentales para la salud de tu mascota ya que, además de las enfermedades bucodentales, los microorganismos que puedan anidar en la cavidad bucal de tu perro pueden acabar afectando a otros órganos como el corazón. Pide consejo a tu veterinario sobre si es necesario realizar una limpieza bucal o si basta con cumplir las normas de higiene básicas.
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Abril: protección contra las garrapatas y mosquitos
Llega la primavera y, sea lluviosa o no, aterriza en nuestros campos y ciudades con unos molestos invitados: las pulgas y garrapatas. Estas últimas se encuentran más activas durante los meses de marzo, abril, mayo y junio. Otros insectos que también pueden estar incordiando son los mosquitos, que pueden transmitir diversas enfermedades, como la leishmania o la filaria. De ahí la importancia de acudir al veterinario y preguntar sobre qué tipo de desparasitación externa le conviene más a tu mascota según vuestro hábitat y costumbres. Y si es necesario reforzar la protección con tratamientos frente a la filiaria. Por otro lado, atenta a la procesionaria, una oruga que representa un verdadero riesgo para ti y la de tu mascota.
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Mayo: toca la segunda desparasitación
Siguiendo con el calendario de desparasitaciones, durante este mes debemos suministrar una desparasitación interna y, así, combatir el aumento de la presencia de estos organismos durante los meses de máximo calor. Además, recuerda que las temperaturas ya pueden ser muy altas en muchos lugares de nuestro país. Y que supone un riesgo para la salud de nuestro animal de compañía, sobre todo, si pertenece a una raza braquicefálica.
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Junio: preparativos para viajar con tu mascota
Se acercan las vacaciones y es el momento de ultimar los preparativos. Si este año vas a viajar con tu mascota, es recomendable llevar a tu perro o gato a una revisión antes de emprender el viaje y, de esta manera, poder disfrutarlo sin preocupaciones. También es imprescindible que te informes de qué vacunas y otros requisitos exigen en el país de destino si vas a viajar fuera de España. Y si vas en coche y tu perro se marea, ten en cuenta que existen remedios que pueden evitarle esta molesta sensación.
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Julio: revisa sus patas y... ¡ojo con la procesionaria!
¿Sales al campo con tu mascota? No te olvides de revisar sus patas, almohadillas, oídos, labios, etc. En la mayoría de los parques, zonas de campo, afueras de las ciudades, las espigas ya campan a sus anchas y son un verdadero riesgo para tu mascota.
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También ten en cuenta que, aunque la temporada de mayor riesgo es la primavera, en zonas de montaña y pinares aún puede haber procesionaria, una oruga que representa un verdadero riesgo para su salud.
Agosto: no te olvides, toca la tercera desparasitación
Para poder seguir disfrutando del verano, con total tranquilidad y proteger a nuestros amigos peludos, no te olvides de la tercera desparasitación interna. Si vas a zonas de riesgo, consulta con tu veterinario si es necesario administrar un tipo de desparasitación que protege a tu mascota del la filiariasis. Por supuesto, si aún no le has puesto protección contra el mosquito que transmite la leishmania, habla con tu veterinario para saber cuál es el método más conveniente según vuestro destino vacacional.
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Septiembre: toca la vacuna de la rabia
Qué mejor manera de empezar el nuevo curso que con los deberes hechos. Este mes, puede ser un buen momento para administrar la vacuna de la rabia, que se debe suministrar anualmente para prevenir a nuestros amigos de esta enfermedad que ataca el sistema nervioso. Ten en cuenta que la vacunación es la mejor manera de evitar un disgusto. Y es que, una vez se manifiestan los síntomas, la rabia es muy difícil de tratar y curar y, generalmente, acaba con el fallecimiento de la mascota.
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Octubre: sigue necesitando desparasitación externa
Una vez terminado el verano, la época del año donde hay más parásitos e insectos que puedan ser vectores de enfermedades, tenemos que volver a reforzar la desparasitación externa con collares, pastillas o pipetas específicas. Y es que, aunque haya pasado la época de mayor contagio de este tipo de ácaros e insectos, el riesgo continua durante todo el año. Especialmente, si sales al campo, en zonas de pasto y ganado, donde la probabilidad es mayor.
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Noviembre: toca la última desparasitación del año
Tu mascota vuelve a necesitar una desparasitación más, esta vez, la última del año. Los parásitos internos más frecuentes y conocidos son los llamados gusanos intestinales, que no solo causan problemas de salud en los animales, también pueden afectar a los humanos. Estos gusanos pueden producir malestar, diarreas, pérdida de peso, entre otros síntomas. Por ello, la mejor medida para prevenirlo es la desparasitación periódica presentes en distintas presentaciones farmacéuticas: pastillas, pastas, jarabes, etc.
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Diciembre: test de leishmania
Para terminar el año con matrícula debemos llevar a nuestro perro o gato a hacer el test de leishmania. Esta enfermedad está provocada por un mosquito, presente sobre todo en verano y en zonas húmedas. Por lo general, los perros suelen infestarse en verano, pero los síntomas no son visibles hasta 3 meses después, por eso se recomienda hacer la prueba durante este mes.
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