La salud de tu mascota

¿Cómo puede afectar a tu mascota la enfermedad del gusano del corazón?

La filarosis es una grave enfermedad que pueden padecer tanto perros como gatos

Por Pilar Hernán

Lo primero que tenemos que tener en cuenta es que estamos ante una enfermedad grave que puede afectar a nuestras mascotas. Así nos lo confirma Ana Ramírez, Directora Técnica Veterinaria, Máster en Investigación en Ciencias de Salud y que posee el Certificate in Advanced Veterinary Practice por Universidad de Liverpool, quien nos detalla que la enfermedad del gusano del corazón o filariosis es una dolencia grave provocada por un parásito que se instala en las cámaras cardíacas y en los pulmones de la mascota, lo que puede provocarle incluso la muerte.

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¿Cuál es la causa que la provoca?

La veterinaria nos aclara que la filariosis es provocada por el mosquito Dirofilaria inmitis, que, con sus picaduras, inyecta larvas a nuestros peludos. Estas larvas traspasan la piel y, viajando por el torrente sanguíneo, llegan hasta el corazón o los pulmones. "El parásito hembra mide entre 15 y 36 centímetros, y tiene unos 5 milímetros de diámetro, mientras que los machos alcanzan un tamaño menor, de aproximadamente la mitad. Cuando la enfermedad está avanzada y se detecta, un perro puede llegar a tener hasta 300 de estos gusanos", nos cuenta.

En España, tal y como nos explica la experta, hay distintas zonas en las que este mosquito tiene mayor prevalencia. Así, la enfermedad es endémica en la Comunidad Valenciana, Aragón, Baleares, Andalucía y Canarias. No obstante, también se han detectado algunos casos en zonas de Galicia, Madrid, Cataluña y La Rioja.

¿A qué mascotas afecta especialmente? "Esta enfermedad afecta principalmente a los perros, aunque también son susceptibles de padecerla tanto gatos como hurones?, nos detalla. Eso sí, matiza que los gatos son menos susceptibles de padecerla, puesto que el parásito no suele sobrevivir tras la picadura. "Por este mismo motivo, suelen encontrarse menor cantidad de parásitos adultos en el corazón de los gatos infectados. En los gatos, además, suele haber más casos de migración de estos parásitos al cerebro o la cavidad abdominal", nos cuenta.

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¿Cómo se manifiesta esta enfermedad?

La enfermedad, aunque siempre es grave, se manifiesta de distintas maneras, pudiendo provocar desde la extenuación ante el ejercicio físico hasta la muerte. "Entre los síntomas más comunes se encuentran la tos, la dificultad para respirar, la pérdida de peso, y la fatiga y debilidad, sobre todo después del ejercicio, cuando puede derivar en desorientación y desmayos", nos comenta la veterinaria, que añade, además, que no es una enfermedad contagiosa. "La enfermedad no se contagia de perro a perro o de gato a gato, ya que para que se produzca es siempre necesaria la intervención de los mosquitos portadores", confirma.

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¿Cómo se llega al diagnóstico de esta enfermedad?

"En este sentido, es esencial que, si observamos los síntomas descritos en nuestras mascotas, acudamos a un centro veterinario para que un especialista realice el chequeo correspondiente. Mediante la auscultación del tórax, el veterinario puede detectar ruidos en los pulmones y el corazón. Además, en la exploración se puede observar el abdomen y patas hinchados debido a la retención de líquidos. A partir de la observación de estos síntomas, se debe hacer una analítica sanguínea o ecocardiografía para confirmar el diagnóstico. A su vez, se deben realizar chequeos periódicos en zonas de riesgo", nos cuenta.

¿Podemos hacer algo para prevenirla?

La especialista apunta que para prevenir la enfermedad del gusano del corazón es imprescindible realizar los chequeos veterinarios rutinarios con la periodicidad adecuada y seguir las indicaciones de los expertos respecto a la desparasitación de las mascotas. "En concreto, para esta dolencia se pueden administrar antiparasitarios internos específicos, que se administran tanto oralmente como inyectados, así como antiparasitarios externos para prevenir la picadura de los mosquitos", dice.

Una vez que nuestra mascota está infectada, ¿cuál es su pronóstico? "La evolución de esta enfermedad es muy lenta, ya que las larvas necesitan de cinco a siete meses para madurar y convertirse en gusanos tras la infección. Por este motivo, el diagnóstico no se da hasta que no alcanza una fase avanzada, para lo que pueden pasar incluso años. Es en ese momento cuando se desarrollan los síntomas y se muestran los signos clínicos de infestación. Esto hace que el pronóstico sea grave, pero tenemos a disposición medicación que puede permitir eliminar el parásito", detalla. ¿Existe tratamiento eficaz para esta enfermedad? "En la actualidad, existe un tratamiento curativo para tratar esta enfermedad, pero, sin duda, la prevención es la clave para que nuestra mascota no acabe sufriendo esta enfermedad", concluye.