Venticuatro horas después del nacimiento de su segunda hija, Enrique Ponce ha atendido a la prensa a las puertas de la Clínica Ruber Internacional de Madrid, donde permanecen ingresadas su mujer, Paloma Cuevas, y la pequeña Bianca. "Estoy muy contento", ha declarado orgulloso.
Además, ha explicado que aunque el nacimiento había sido por cesárea pudo participar en cierto modo en el momento del alumbramiento al cortar el cordón umbilical. Con la llegada de Bianca, Ponce se ha planteado reducir sus compromisos profesionales y no ha dudado en afirmar: "A partir de ahora torearé menos para estar más tiempo con las niñas". Ponce también ha comentado que Paloma y Bianca se encuentran perfectamente y que su hija mayor, Paloma, que el próximo mes de abril cumplirá cuatro años, ya conoce a su hermana pequeña.
La segunda hija de Enrique Ponce y Paloma Cuevas llegó al mundo a primera hora de la tarde de ayer y desde entonces las visitas al centro hospitalario no han cesado. Los primeros en conocer a la pequeña Bianca fueron los abuelos maternos, Victoriano Valencia y Paloma Cuevas, y paternos, Emilio y Enriqueta. Pero hasta la clínica se han acercado también algunos amigos del matrimonio para dar la bienvenida al bebé. Así Ramón García y su mujer Patricia Cerezo acudieron para dar la enhorabuena a la pareja, igual que Luis Alfonso de Borbón que se acercó con su mujer Margarita.
