"Se nos ha ido Rocío Jurado. Una señora del escenario, y también una amiga del alma. Yo iré hoy a Chipiona a darle el último adiós. La quería y la querré para siempre". Con estas palabras, Julio Iglesias rendía su homenaje - de un grande para otro grande- a Rocío Jurado en las páginas del diario ABC.
El artista llegó ayer a Málaga, a su casa de Ojén, y esta mañana a las diez de la mañana entraba, acompañado de su mujer, Miranda, en el santuario de Nuestra Señora de Regla para mostrar personalmente sus condolencias a la familia de Rocío. Visiblemente emocionado y afectado, Julio abrazaba a Ortega Cano y después se sentaba en uno de los bancos centrales del templo, junto a los chipioneros que aguardaban el comienzo del funeral.
Isabel Pantoja estuvo toda la noche en la capilla ardiente Pero Julio no ha sido la única gran figura de la canción española que ha querido acompañar a la familia en estos difíciles momentos. Isabel Pantoja (rival en los escenarios de Jurado) llegó a Chipiona a las diez de la noche de ayer, tres horas antes de que se abriera la capilla ardiente y cuando todavía no había aterrizado en Jerez de la Frontera el avión con los restos mortales de la cantante. Isabel y Julián Muñoz han pasado toda la noche en el Santuario y esta mañana, con los ojos hinchados de tanto llorar, ha protagonizado uno de los momentos más emotivos con el sentido abrazo que ella y Gloria, la hermana de Rocío se han dado.
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