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La leche es uno de los alimentos básicos de la dieta ya que, además de ser la fuente principal de calcio, mineral que es necesario consumir porque el cuerpo no lo produce, nos proporciona nutrientes esenciales como vitaminas A, B y D, y otros minerales. Su bajo contenido en calorías la convierte en un producto equilibrado que se debe consumir desde el nacimiento y durante toda la vida. De aquí viene la importancia de concienciar a los niños de tomarla cada día en las proporciones recomendadas (entre 3 y 4 vasos), y que lo conviertan en una rutina con la que evitar la desnutrición y las dificultades en el crecimiento, en la formación de los huesos y en su mantenimiento.
Además de ayudarnos a fortalecer y mantener sanos los huesos, la leche es esencial para asegurar un buen desarrollo físico y cognitivo. Consumir unos 800-1.000mg aporta proteínas de alto valor biológico, hidratos de carbono, grasas, magnesio, fósforo y zinc, una ingesta que ayuda a tener una dieta equilibrada y completa.
La obesidad y otras patologías también pueden evitarse gracias al consumo de leche, sobre todo si consumimos aquellas opciones sin lactosa, un componente que hoy en día genera mucho rechazo debido al alto porcentaje de personas intolerantes a ella. Puleva mañanas ligeras es una opción equilibrada en nutrientes y perfecta para no renunciar a los beneficios de la leche, con todo el sabor y los mismos beneficios que nos aporta.
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