Probablemente conozca a alguien de su entorno que ya ha convivido durante unos días con la gripe. No es extraño, pues en esta ocasión la incidencia del virus es 20 veces superior a la del año pasado. De hecho, sólo durante la primera semana de noviembre se han visto afectadas 189 personas por cada 100.000 habitantes. La tasa de afectados es la mayor del último decenio, según recalcó la propia Ana Pastor, ministra de Sanidad (desde 1993, durante la semana del 2 al 8 de noviembre, no se habían producido estas cifras).
Se suma además, que venimos de un año especialmente favorable, en el que el número de infectados por gripe fue bastante bajo. Eso ha llevado a que, con respecto a las mismas fechas del año pasado, se multiplique por 20 el número de casos. "Hay que resaltar que el virus es agresivo y las tasas de incidencia son como las de los años más duros de la década", ha explicado José María Martín Moreno, director general de Salud Pública.
Todos estos datos explican la campaña de Sanidad a favor de la vacunación, el único medio eficaz para prevenir la gripe, y especialmente importante en los grupos de riesgo (ancianos, niños, personal sanitario y enfermos crónicos). Precisamente la ministra de Sanidad ha apuntado que la incidencia de la gripe es uno de los factores que han provocado el colapso de las urgencias sanitarias.
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