Los consejos de Diego Olivares para que tus plantas crezcan felices (¡y preciosas!)

¿Ya no te consideras un jardinero principiante? Entonces eres un amante de las plantas experimentado, que te atreves a esquejar, a trasplantar y cuidas tus ejemplares como lo que son, tesoros. Igual de apasionado por la vegetación es el ingeniero agrícola y experto en jardinería Diego Olivares, conocido como 'Loco Plantas' (por el nombre de su blog: www.locoplantas.com) y autor del libro de la editorial Zenith ‘Manual para amar (y no matar) tus plantas’.

Hemos contactado con él para que ayude a todos los lectores de ¡HOLA! a subir su nivel de conocimientos sobre el cultivo de las plantas de interior. Sus consejos valen oro. ¡Léelos y tus plantas vivirán más felices!

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Tienes un buen nivel de cuidado de las plantas cuando…

Ya no eres un jardinero principiante, eres experimentado, porque has aprendido la lección de que las plantas se ubican con más o menos luz según en su naturaleza están viviendo y se reproducen, es decir, no es lo mismo una planta que esté en su lugar de origen en el sotobosque y tapada por varios árboles donde la sombra es su día a día y los rayos de sol le llegan escasamente, que una planta a la que le da el sol casi todo el rato.

“En casa debemos tener esto en cuenta, una planta exigente en luz, por ejemplo, una Strelitzia augusta, en su hábitat natural suele recibir muchísima luz, por lo que deberemos ubicarla cerca de una ventana y preferiblemente en una ubicación sur o este”, detalla Diego.

Respecto al riego, una planta que vive en ambientes desérticos y tolera la sequía, como una suculenta, necesitará menos aporte de agua que una especie tropical como, como por ejemplo el anturio (Anthurium) o la calatea (Calathea), acostumbrada a la humedad y la lluvia.

También demuestra que eres un jardinero sénior que no das una planta por perdida, si no luce su mejor cara, incluso investigas en sus raíces no sea que de ahí venga el problema y exista pudrición.

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La experiencia (con las plagas) es un grado

Detectar qué plaga concreta afecta a tu ejemplar inicialmente no es fácil. Pero la experiencia nos ayuda a diferenciar el distinto tipo de bichito que está atacando a la planta, pues tienen distintas formas.

También podemos advertirlo según se manifiesta en la planta, “a veces confundimos una mancha amarilla en las hojas con hongos o que se está quemando cuando todavía no está adaptada a tanto sol y resulta que por debajo hay una plaga que se alimenta de ella terminando casi por completo con la hoja”.

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¡Agrupa plantas!

¿Cuándo en la naturaleza vemos plantas aisladas? Nunca. Así, Diego nos invita a agruparlas en lugar de dispersarlas. ¿Cómo crear conjuntos acertados? Colocando juntas las que tengan las mismas exigencias respecto a la luz, y si las tenemos cultivadas en una misma jardinera, también las mismas exigencias en agua.

¡Creemos un jardín interior! “A nivel estético propongo variar un poco, pero no en muchos colores porque a veces marean un poco a la vista y se generan sensaciones confusas. Sí resulta interesante mezclar tamaños y texturas, así, situar plantas de hojas grandes detrás y las de hoja pequeña delante, combinar ejemplares de hoja fina con otros de hoja más gruesa”, explica el experto. Hay tanta riqueza botánica que lo ideal es poder mezclar plantas con y sin flor, con hojas lisas o aterciopeladas, etc.

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Cuidado con las plantas incompatibles

En exterior cultivadas en tierra hay plantas que resultan incompatibles unas con otras y no se interrelacionan bien, pero ¡atención!, ¿existe este mismo problema con las de interior? La respuesta es afirmativa. Diego apunta dos razones por las que las plantas puedan ser incompatibles:

• Aspecto visual: no conviene mezclar plantas que son muy parecidas en una misma jardinera.

• Punto de vista de desarrollo, el aspecto agronómico: si compiten por la luz (y espacio) o por los nutrientes.

En la propuesta, las plantas son compatibles. La composición de Oh!MyFlor, en una base de madera natural, se hace con suculentas y cactus.

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¿Cómo decorar en distintos niveles, utilizar distintos planos?

Esta parte le gusta especialmente al ingeniero agrícola y experto en jardinería, y la llama ‘micropaisajismo’. Dentro de casa existen un sinfín de recursos para exponer y tener bien cuidadas las plantas, los alféizares de las ventanas, ganchos para plantas colgantes, estantes, muebles…

“En el suelo lo mejor es que no nos tropecemos con nada así que siempre recomiendo tener pequeños pedestales, las macetas con pies, pues de este modo damos altura a la planta sin perder mucho espacio”, revela Diego. El coqueto modelo para dos plantas (en la imagen) es de La Redoute Interieurs.

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Subimos el nivel de ‘plant power’ si acertamos con el trasplante

El experto aconseja no trasplantar a lo loco. La planta sufrirá estrés si solo llegar a su nueva casa se la cambia de recipiente y se le sustituye el sustrato. Además, hay momentos críticos en los que es más conveniente evitarlo: cuando la planta está luchando por sobrevivir, por ejemplo, porque hace mucho calor o frío, ha sufrido el ataque de una plaga… Tampoco es aconsejable trasplantar si el ejemplar se encuentra en su periodo de floración.

No obstante, sí hay que trasplantar cuando el suelo es pobre o no resulta el adecuado para el correcto desarrollo de la planta. Diego nos invita a usar distintos tipos de sustratos para los diferentes tipos de plantas en lugar de acomodarnos y emplear siempre el sustrato universal.

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Nutrientes en la tierra

En las plantas de interior, donde cultivamos en macetas, los recursos para la planta son finitos, tenemos que ser nosotros quienes apoyemos a la planta, de ahí que sea tan interesante fertilizar.

¿Cómo recomienda hacerlo Diego? Ponernos avisos con alarmas con la frecuencia de abono y en qué meses del año, pues es fácil olvidarnos y hay épocas en los que las plantas no suelen necesitarlo. Una advertencia, igual de malo es no fertilizar como pasarte con el abono, que puede causar problemas de salud como el marchitamiento, poca floración o un crecimiento excesivo o débil.

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No hay plantas inmortales, pero casi

Dentro de casa las ‘indestructibles’ son las xerofíticas (es decir, con pocas necesidades de riego), como los cactus y las suculentas. “Su tolerancia a la sequía viene enriquecida por su tolerancia también a las plagas, a las enfermedades y a las condiciones de luz y de temperatura”, detalla Diego, quien a su vez nos da más ejemplos de plantas muy resistentes y que podemos cultivar dentro de casa:

• El poto (Epipremnum aureum), una planta frondosa y bella.

• La ceropegia también denominada cordón de corazones (Ceropegia Woodii), en la imagen.

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Selección de plantas que se sienten felices en lugares sombreados  

En este caso, las opciones ofrecidas por Diego son:

• La zamioculca, conocida como planta ZZ por su nombre botánico, Zamioculcas zamiifolia. Su porte es moderno y sencillo.

• La estilizada sansevieria (Sansevieria trifasciata), también conocida como lengua de suegra, lengua de tigre o espada de San Jorge.

• La aspidistra (Aspidistra elatior), en la imagen, de grandes hojas lanceoladas.

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¿Qué aportan a los interiores las plantas?

La respuesta de un autodefinido como ‘loco de las plantas’ es reflexiva. "Primero de todo alegran los interiores y nos producen felicidad, sobre todo cuando vemos que con nuestros cuidados prosperan -y prosigue-. Es la forma más en pequeña escala de introducir la naturaleza dentro de casa, en nuestro día a día. Está en nuestro ADN, la naturaleza nos encanta a todos y nos la trae estas especies botánicas”. A la postre, ¡nos aportan vida!

Por último, añade, “tener plantas y cuidarlas nos hace más sensibles al medio ambiente, con lo cual seremos más respetuosos con él en todos los aspectos”.

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