Mala iluminación
Una iluminación deficiente puede hacer que tu casa se sienta apagada y poco acogedora. Para solucionar este problema, es importante combinar diferentes fuentes de luz. Asegúrate de tener iluminación ambiental, como lámparas de techo o plafones (dependiendo de la estancia), para iluminar toda la habitación de manera uniforme. A estas suma también iluminación puntual mediante lámparas de mesa o apliques de pared con los que crear puntos focales y resaltar áreas específicas de la decoración, como un rincón o una pared con un cuadro. Valora también la opción de utilizar luces LED, con las que añadirás un ambiente más acogedor.
Leer: Ideas de iluminación que hacen tu casa más cómoda y acogedora