1/10 © Banak Importa

Las librerías son uno de los muebles más funcionales con los que cuenta cualquier vivienda, pues proporcionan mucha capacidad de almacenaje. Pero además, son piezas que resultan sumamente decorativas y que se pueden situar en cualquier estancia, desde el salón hasta pasillos o el recibidor.

En la propuesta la librería Liverpool (120 x 28 x 171 cm), de Banak Importa, combina madera y metal y ofrece una estética industrial cálida en una sala de estar de estilo moderno y natural.

¿Tienes dudas a la hora de escoger la librería perfecta? Te las resolvemos todas para que des con el diseño que mejor se adapte a ti y a tu hogar.

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2/10 © Caracter Photo para Arquitectura Serradell

Tres opciones, tres necesidades

Como ocurre en todos los muebles de gran envergadura, las posibilidades de personalización son grandes. Incluso en los muebles fabricados de forma seriada, en muchas ocasiones puedes decir el color final del mueble o el tipo de estante o si lleva alguna puerta.

Aunque si precisas un diseño que se adapte a tus necesidades, resultan muy versátiles las librerías modulares. Y, realmente cuando lo que precisas es que el mueble se ajuste como un guante al espacio disponible, nada mejor que encargar una estantería a medida. Por la tercera opción es por la que se ha decantado Arquitectura Serradell en este comedor, configurando una decoración cuidada al máximo con estantes que hasta integran tiras LED.

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3/10 © Vical

¿Dónde situarla?

Realmente una librería es apta en cualquier rincón de la casa, en el salón puede recorrer toda la pared del mueble de la televisión, en el comedor puede hacer de separador con el pasillo u otro ambiente, en el dormitorio, junto con una cómoda butaca, configurará un agradable rincón de lectura. Solo hay una norma y es que sus dimensiones vayan acordes con la estancia. No ocupes toda la pared de suelo a techo a no ser que se trate de un espacio amplio y luminoso, de lo contrario mejor opta por piezas más ligeras a la vista, por ejemplo de colores claros, con estantes de cristal, diseños volados o incluso solo estructuras murales de reducidas dimensiones.

Las medidas del modelo Tedim, de la firma Vical, son: 60 x 64 x 232 cm, lo que convierte a esta estantería de inspiración étnica en ideal hasta para zonas de paso, dormitorios o despachos no muy grandes.

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4/10 © Raquel González Interiorismo

Mucho más que libros

Sin duda aunque llamemos a este funcional mueble librería, puede albergar y es más, ¡debe incorporarlos!, muchos más objetos que publicaciones (como vemos en este comedor que ha decorado el estudio Raquel González Interiorismo) y siempre hay que procurar que el resultado resulte visualmente estético y ordenado.

Precisamente una estantería es el lugar perfecto para exponer fotografías, plantas, esculturas e incluso añadir cajas de ordenación con pequeños objetos. Otro de los complementos habituales son los jarrones solos o con preciosos y perfumados ramos. ¿Más cosas? CD’s o vinilos, si no te has pasado a tener toda tu música en formato digital.

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5/10 © BoConcept

Unas medidas básicas

Otro punto importante es tener en cuenta la profundidad y altura entre los estantes. Para acomodar bien los libros conviene que al menos midan 28 cm de profundidad. ¿Cuentas con publicaciones más grandes? Tienes dos soluciones, la primera es apostar por estantes más profundos en toda la librería, aunque también muy acertado es que el mueble haga forma de escalera y vaya estrechándose a medida que gane altura.

En la imagen, la librería diseñada por Morten Georgsen para la firma BoConcept la conforman los módulos Como, con una profundidad de 35,5 cm. De la misma marca es también la llamativa y mullida butaca Fusion, cuyo diseño se inspira en el arte del origami.

6/10 © Ethnicraft

En cuanto a la altura entre baldas, calcula que debe haber de 20 a 30 cm para libros de tamaño estándar y 50 cm para lámparas de sobremesa, jarrones y otros objetos decorativos.

Al igual que en el ancho, también en el alto se puede jugar, si no todas las baldas comparten una imagen homogénea, sino que tienen diferentes alturas para una composición tan dinámica como la de la imagen, una librería de Ethnicraft.

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7/10 © Modulnova

¿Cómo colocarla?

Por regla general una librería va arrimada a una pared, aunque también es habitual que vaya exenta. Y ahora que es cada vez más común que los ambientes compartan espacio, este mueble también suele sustituir a un tabique divisor a la hora de diferenciar ambientes. ¿Ventajas frente a una pared? Al no resultar opaco, permite el paso de la luz y relacionar visualmente todo, lo que aporta mayor sensación de amplitud, como podemos apreciar en la propuesta que cuenta con una librería de la firma italiana Modulnova.

Las librerías abiertas y de doble cara son perfectas como separadores de ambientes, ¿no te parece? Las hay autoportantes o, si lo prefieres, las que requieren fijación a suelo, a techo o a ambos puntos.

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8/10 © La Redoute Interieurs

Hablando de formas

Una de las ventajas que ofrece el mercado es que existen librerías de todas las formas: las más tradicionales son las lineales y altas, pero incluso encontrarás bajas y adaptables por ejemplo a la altura del sofá, para que puedas adosarla a su trasera (como ocurre con este modelo de La Redoute Interieurs).

¿Qué necesitas rentabilizar hasta el último centímetro y procurar mucho espacio de almacenaje? También las hay rinconeras, formando ángulos. Y además de las lineales existen modelos con formas más alternativas: redondas, piramidales, onduladas e incluso que reproducen formas de la naturaleza, como nubes o árboles.

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9/10 © Kave Home

Amplia gama de materiales

En este aspecto también hay muchísimo donde elegir, con el predominio de dos materiales estrella: la madera y el metal. En ocasiones la pieza se fabrica en su totalidad en madera y, en otras, la estructura es de hierro, aluminio, acero u otro metal. Esta propuesta de Kave Home (el modelo Nadyria; 100 x 41 x 180 cm), por ejemplo, mezcla chapa de roble y acero.

Más alternativas las encontramos en materiales como el MDF o el cristal templado (este último aplicado en solo en los estantes). Y, por supuesto, también en las fibras naturales, como el bambú o el mimbre, configurando librerías de última tendencia.

Cada material, junto con las formas que le acompañen, ofrecerán una estética muy distinta. Las metálicas son por lo general modernas, aunque también las hay de líneas clásicas en especial en acabados oro o cobre. Y las de fibras son perfectas en ambientaciones nórdicas o naturales.

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10/10 © Maisons du Monde

Valora si quieres un mueble polivalente

Especialmente tras el auge del teletrabajo, más viviendas están demandado contar con una oficina en casa, aunque sea en un rincón improvisado del salón o el comedor, por ejemplo. Y en ese caso las librerías pueden ser grandes aliadas, si además de estantes albergan mesas de escritorio y cajoneras para mantener carpetas y documentos fuera de la vista y en orden, como vemos en la propuesta, una estantería multifunción modular de la colección Tarifa de Maisons du Monde, que combina acacia con rejilla de mimbre y hace del mueble reciclable al final de su vida.
En el dormitorio, si en lugar de contar con un despacho deseas crear un coqueto rincón de tocador, una estantería que incluya una mesa también te resultará de gran utilidad.

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