Hay ciertos electrodomésticos que consumen mucha energía, pero sin los cuales no podemos vivir. La lavadora es uno de ellos y, con los actuales precios de la electricidad, no nos queda otra que aprender a usarla de una manera más eficiente que nos ayude a ahorrar. Y lo mismo sucede con la secadora. Aquí tienes algunos trucos que funcionan para conseguirlo.

Elegir el mejor momento para hacer la colada

Mucho se ha comentado sobre la necesidad de poner la lavadora de noche para aprovechar las horas en las que la electricidad es más barata, y aunque a veces suena a broma, realmente no lo es. Utilizar algunos electrodomésticos a unas horas determinadas puede suponer un buen ahorro en la factura.

No se trata de levantarse a las 3 de la mañana para lavar la ropa, sino de averiguar cuándo es más económica la luz según la tarifa que tenemos contratada. Así podremos tomar medidas. Como, por ejemplo, programar la lavadora para que lave de madrugada y termine justo a la hora que nos levantamos, antes de las 8 de la mañana, que suele ser cuando empieza la franja horaria más cara.

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Conoce tu lavadora y tu secadora

Puede que no hayas leído nunca el libro de instrucciones de estos electrodomésticos, que hayas aprendido a utilizar uno o dos programas y no necesites más. Sin embargo, saber cuántos ciclos puedes elegir según la ropa que tengas que lavar es interesante. Así podrás seleccionar el lavado más eficiente en cada momento, o el proceso de secado de la ropa que más convenga.

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Lavar en agua fría

Hoy día la ropa no se mancha tanto. Exceptuando situaciones puntuales, o si tienes niños pequeños en casa, por regla general la ropa no está demasiado sucia a la hora de hacer la colada. Además, las lavadoras modernas son muy eficaces en lo que a eliminar la suciedad se refiere. Y también lo son los detergentes actuales, que se disuelven sin problema en agua fría y consiguen unos resultados óptimos.

Por todo ello merece la pena lavar en agua fría, ya que el consumo de energía es considerablemente menor. Ten en cuenta que el 80 % de la energía que consume la lavadora la emplea en calentar el agua. Si seleccionas lavar en frío (o a una temperatura baja) estarás ahorrando en la factura de la luz. Además, tu ropa sufrirá menos.

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Elige electrodomésticos eficientes

¿Quieres ahorrar a la hora de poner la lavadora? En ese caso conviene que elijas un electrodoméstico con una óptima clasificación energética.

Hasta este año lo mejor era elegir una lavadora A+++, mucho más eficiente que las A+. Sin embargo, a partir de marzo de 2021 esta clasificación ha cambiado: ahora va de la A a la G, sin signos de este tipo ++.

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Un buen mantenimiento es esencial

Si quieres que tu lavadora y tu secadora funcionen de forma eficiente, es importante que las limpies de vez en cuando y que les hagas el mantenimiento adecuado. Funcionarán mejor y consumirán menos energía.

Limpia la lavadora, por ejemplo, una vez al mes, programando un ciclo corto sin ropa al alta temperatura (más de 60º C). También tienes que repasar el filtro de la lavadora y la goma de la puerta. Cuando el electrodoméstico termina de lavar, deja la puerta abierta para que la goma se seque convenientemente.

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No te pases con el detergente

Poner más detergente del que es necesario y recomendable es un error que solemos cometer. Puede que sea porque pensemos que así la ropa quedará más limpia. Nada más lejos de la realidad. No solo no se limpia mejor, sino que suelen quedar restos de jabón entre las fibras (se notará más en las prendas oscuras), lo que no es nada recomendable.

Además, se creará una gran cantidad de espuma y la lavadora tendrá que trabajar más, y consumirá más energía. Para evitar estos problemas, dosifica el detergente y emplea jabón líquido, que se disuelve mejor.

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Pon la lavadora con la carga completa

¿Cómo hemos de cargar la lavadora para conseguir el mejor resultado a todos los niveles? La respuesta a esta pregunta es un tanto ambigua. Dejar el tambor a la mitad para que la ropa tenga espacio y el lavado sea óptimo, es una forma de consumir más energía, ya que el lavado no se rentabiliza al máximo.

Pero tampoco llenar a topa la lavadora es la solución porque la ropa no quedará bien limpia. La clave está en el término medio: llena la lavadora pero no del todo, dejando unos cuatro dedos de espacio entre la ropa y la parte superior del tambor.

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Minimiza el uso de la secadora

La secadora es un electrodoméstico muy práctico en muchas ocasiones. Sin embargo, consume bastante energía, por lo que conviene no excederse en su uso. Si hace bueno y puedes tender al aire libre, prioriza esta opción. Conseguirás reducir la factura de la luz.

Una ayuda es centrifugar la ropa para que tarde menos en secarse, aunque tampoco conviene abusar de ello: la lavadora consume más en esta parte del ciclo de lavado y la ropa sufre.

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Trucos para usar la secadora y ahorrar

Si no puedes evitar usar la secadora, sí puedes aplicar estos trucos para utilizarla de la forma más eficiente posible.

- Ya sabes que se trata de un electrodoméstico que consume mucha energía, por lo que conviene tener muy en cuenta las franjas horarias de tu tarifa de electricidad.

- Además, nunca debes llenar la secadora; le costará más secar la ropa y trabajará en exceso, consumiendo más. Es mejor (y se ahorra energía) si la pones dos veces a media carga en lugar de una solamente a carga completa.

- Deja libre al menos el 20% del espacio del interior del tambor.

- Elige siempre una secadora eficiente. En este electrodoméstico la diferencia de consumo es notable. De hecho, una secadora de categoría A puede consumir hasta un 40 % menos de energía que otra de categoría C (nueva clasificación vigente desde marzo de 2021).

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