En busca del confort
En toda la casa lo primero que se hizo fue alisar todas las paredes que conservaban un gotelé muy pronunciado y pintar en colores claros, un luminoso blanco roto.
En el salón, por ejemplo, se siente confort al instante. Para lograr esa sensación “hemos mantenido los materiales originales, como la chimenea o el mueble de obra a medida, pero cambiando los tonos para darle más luz y calidez. Maderas, fibras, hierro y las texturas naturales con los complementos hacen el resto”, apunta Dara.
La alfombra de estilo Shabby Chic es el modelo Clara de Vical, los sofás desenfundables, Ektorp, de Ikea, la mesa con el pie de hierro, Oak, de Taller de las Indias, y la pareja de pufs de fibras se adquirieron en Vackart.
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