Claves para elegir la mejor grifería para el fregadero de la cocina
Los diseños que triunfan, funcionalidades interesantes, etc.
Es tal la variedad de griferías de cocina que existen que elegirla puede ser complicado. Más allá de la estética o del estilo, es importante tener en cuenta otros factores. Descubre cuáles son para saber qué grifo es el más adecuado para ti.
Un grifo de calidad
Es la primera cuestión que has de plantearte y la más importante: comprar un grifo de calidad es fundamental si quieres que te dure mucho tiempo en buenas condiciones. Los grifos son elementos que se utilizan mucho y a diario, por lo que es importante no escatimar en calidad.
Hay una gran variedad de modelos, diseños y acabados, pero opta siempre por buenas marcas que ofrezcan garantía. Es importante, por ejemplo, que lleven discos cerámicos en el mecanismo.
En cuanto al tipo, diseño o tecnología, decídete por un modelo que se adapte al estilo de tu cocina, desde el mobiliario al equipamiento.
Leer: Estos fregaderos y grifos último modelo te ayudarán a lograr una 'cocina 10'
¿Qué aspectos hay que tener en cuenta?
Además de la calidad, un punto prioritario a la hora de elegir, debes fijarte en el espacio de tu cocina. Piensa si lo vas a instalar en la encimera o en la pared: aunque menos habitual, esta última es una alternativa a tener en cuenta si tienes poco espacio.
Toma medidas del fregadero y de la distancia entre este y la pared. Si tienes una ventana justo delante de la pila, mide también la distancia para valorar el tipo de grifo que necesitas.
Leer: Así debes organizar y limpiar los armarios de la cocina
La altura del caño, un cuestión esencial
Existen diferentes tipos de caños para elegir, en función de su altura. Además de pensar en los que te gusten más o menos, debes tener en cuenta otros aspectos para elegir con acierto.
- De caño alto, más adecuados para fregaderos de gran tamaño. Perfectos para llenar con comodidad recipientes grandes como ollas o cubos. No elijas un grifo de caño alto si tu pila es pequeña: salpicará todo de agua y no quedará bien.
- Los grifos de caño bajo son adecuados para todo tipo de fregaderos. Desde un punto de vista estético son menos llamativos, pero resultan perfectos cuando se necesita un grifo práctico y funcional.
Leer: Así hay que limpiar las juntas de los azulejos de paredes y suelos para que queden impecables
Para situaciones especiales
En ocasiones, debido a ciertas necesidades puntuales que podemos tener, necesitamos un grifo específico.
- Si tienes una ventana delante del fregadero, necesitas un grifo de caño abatible. Este tipo de grifos se tumban para dejar libre el espacio delante de la ventana y así puedas abrirla sin problemas.
- Con caño extraíble. Una función de algunos grifos, ya sean de caño alto o bajo. La parte del grifo, larga y flexible, se extrae para utilizarla como ducha, lo que resulta cómodo para fregaderos de dos senos, grandes y profundos.
- Con caño giratorio. Para poder colocarlo en cualquier posición.
Leer: ¿Sabes cuál es el mejor material para el salpicadero de la cocina?
La apertura que más te conviene
Los grifos de cocina pueden ser monomando o bimando. En el primer caso, cuentan con un solo mando para regular el caudal del agua y la temperatura. Son los más habituales, ya que resultan más fáciles y cómodos de usar y, además, ahorran agua.
Los grifos bimando, con un mando para el agua fría y otro para el agua caliente, se suelen elegir para algunos modelos por cuestiones de diseños, como en los grifos de estilo retro.
Funcionalidades extra que te hacen la vida más fácil
Hay muchas cosas que puedes pedirle hoy día a tu grifo de cocina. La tecnología ha avanzado de forma increíble y las griferías son mucho más que un caño por el que sale agua.
Puedes, por ejemplo, elegir un grifo equipado con sensores que se accionan de manera inmediata cuando detectan tus manos debajo de él. O grifos con pedal, para abrirlos con el pie si tienes las manos sucias u ocupadas.
También hay grifos termostáticos que te proveen de agua muy caliente al instante, o modelos que ofrecen la opción de elegir el tipo de chorro que necesitas, de tipo ducha o con efecto lluvia.
Incluso puedes optar por grifos que llevan incorporado un filtro de ósmosis para disfrutar de agua purificada y filtrada. Un sinfín de funcionalidades que convierten la simple utilización del fregadero de la cocina en toda una experiencia.
Leer: Cómo limpiar y cuidar la encimera de la cocina para que esté siempre como el primer día
Un acabado para cada cocina
Si hace un tiempo las griferías de la cocina (y también las del cuarto de baño) eran simplemente cromadas, hoy se han desarrollado multitud de opciones en materia de colores y acabados.
Puedes elegir grifos negros, blancos, dorados, en efecto cobre, etc. Las posibilidades son inmensas, lo que garantiza que encontrarás el grifo perfecto para cada cocina en función del estilo de cada una. Todos estos acabados actuales son resistentes, duraderos y fáciles de limpiar y mantener.
Una idea interesante es elegir el color del grifo igual que el del fregadero, ya que también hay muchas opciones para elegir.
Leer: Las griferías de baño y cocina se olvidan del acabado inox (¡ahora tienen color!)
El estilo cuenta
El estilo del grifo debe ser acorde al del resto de los elementos de la cocina. Hoy tienes un sinfín de modelos entre los que elegir, para dar con el que mejor funciona.
Ya sea tu cocina clásica, minimalista, de aire nórdico o industrial, siempre darás con una grifería que se adapta como anillo al dedo.
- Elige un grifo de líneas puras y ángulos rectos si tu cocina es de estilo contemporáneo y minimalista.
- Grifos de corte industrial, que se inspiran en los modelos de las pescaderías o de las cocinas de los restaurantes, con caño alto y ducha de muelle.
- De aire vintage, con líneas curvas, dos mandos y acabados en cobre o latón, perfectos para cocinas de estilo retro.
La limpieza y el mantenimiento
Si eliges grifos de calidad, no tendrás que realizar ningún mantenimiento, más allá de limpiarlo de manera adecuada. Para ello repásalo cuando sea necesario con una bayeta de microfibra y agua jabonosa.
No utilices para limpiarlo ni estropajos abrasivos que puedan arañar el grifo, ni limpiadores químicos demasiado fuertes que los estropeen.
Si vives en una zona donde el agua es dura y con mucha cal, seca bien la grifería después de limpiarla y no quedarán marcas.
Leer: ¿Limpieza general en la cocina? Trucos para dejarla impecable