Ventajas de tener un altillo en casa y todos los usos que puedes darle
Perfecto para rentabilizar el espacio cuando hay pocos metros
Cuando no sobran los metros pero hay suficiente altura libre entre el suelo y el techo de la casa, una idea muy práctica es construir un altillo que nos proporcione una superficie extra. En el caso de los estudios de unos 30 metros cuadrados, por lo general el altillo alberga el dormitorio, como ocurre en este proyecto de Twobo.
Aunque en las viviendas más amplias las posibilidades se multiplican y esta entreplanta puede convertirse en despacho, habitación de invitados o, simplemente, en un valioso espacio de almacenaje más. Estas y otras sugerencias detalladas en el reportaje. ¡Descúbrelas todas y diseña un altillo a la medida de tus necesidades!
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Usos posibles del altillo, según la altura
Toca cambiar el chip y en lugar de pensar en metros cuadrados deberás tener en cuenta los metros cúbicos, considerando la altura del techo. Teniendo en cuenta que en la zona inferior conviene respetar una altura mínima de 2,20 m cuando se trata de pasillos, cocinas y baños, y 2,50 m en salones, comedores y dormitorios, veremos que por eso en los estudios muy pequeños el altillo suele ir sobre la cocina, para ganar la máxima altura en el altillo.
A todo ello debemos sumar unos 0,15 cm de grosor de la estructura de la entreplanta y ya ver cuánto queda de alto hasta el techo. Si queda libre menos de 1.20 m, lo mejor será ganar almacenaje. Entre 1,20 y menos de 2 m, el uso ya puede ser más variado, aunque teniendo en cuenta que quizá debas desplazarte agachado. Por ejemplo, se puede emplear de dormitorio, rincón de trabajo o zona de lectura. En este proyecto de Barronkress, el altillo en el dormitorio configura un espacio de ocio donde relajarse y también tiene capacidad para guardar.
Si el altillo dispone de más de 2 m de altura de techo a suelo, las posibilidades se multiplican y ahí puedes crear todo tipo de espacios muy cómodos en su uso: dormitorios, despachos, sala de juegos…
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¿Qué tal crear un rincón de relax?
Neus Casanova, del estudio Degoma design, es la artífice de la reforma de un piso de reducidas dimensiones. Y afirma: “¡un piso pequeño es menos pequeño con techos de tres metros! Crear un altillo en estancias donde la altura no es necesaria como el baño, la cocina o un vestidor, nos permite ganar espacio como, por ejemplo, una habitación de invitados, un espacio de meditación o simplemente espacio de almacenaje. Además, también aporta sensación de amplitud”.
Aquí, concretamente, se coloca una colchoneta, unos cojines en forma de nube de Paparajote Factory y unas jaulas decorativas, de Tiger.
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Más que un dormitorio
Marta Badiola es la fundadora de Pura arquitectura y la responsable de crear este altillo para una vivienda con 3,47 m de altura. “Con unas medidas de 2 x 2,8 m, la entreplanta permite colocar la cama doble en ambas direcciones y un proyector colgado del techo utiliza la pared como pantalla para ser vista desde la cama”. Descanso y espacio para ver cine en casa, todo en uno.
Copia esta idea si el altillo no va a contar con mucha altura: elimina la cama y pon el colchón directamente en el suelo.
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¡Pocos metros, mucho almacenaje!
¿Cómo convertir una pequeña oficina de 28m2 en vivienda de una mujer soltera? En Beriot, Bernardini arquitectos han dado con la solución situando baño, cocina y salón en la zona inferior y el dormitorio con armario en la superior. Y como no era cuestión de desaprovechar espacio, la escalera de acceso tiene una gran capacidad de almacenaje. Además, es móvil, y ocupa menos espacio cuando no se necesita tener abierta la zona de armario. Todas las soluciones de mobiliario se han hecho a medida siguiendo el diseño del estudio de arquitectura y en tablero de DM, para lograr un coste contenido.
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Un dormitorio juvenil, ¡con litera!
¿Apostar por una litera en el altillo? Sí se puede, cuando la altura es bastante grande, porque lo habitual es crear una zona de descanso con una única cama. Pero en este proyecto de Martín Lejarraga Oficina de Arquitectura la altura total libre del espacio de suelo a techo es 5.4 m, lo que ha permitido instalar una litera en la zona de altillo sin problemas, creando así una acogedora habitación para compartir sobre la zona de lavabo del baño.
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El factor ubicación también es importante
Estamos viendo una reforma emprendida por el estudio Cotacero Taller Arquitectura que convierte un local comercial en vivienda y, en la imagen, nos encontramos en la entrada. Teniendo los propietarios niños en casa, se ha realizado un altillo para crear un rincón de juegos. Una fantástica ‘casa del árbol’ en versión urbana, desde donde los pequeños de la casa pueden gozar de la visión desde las alturas.
Este vestíbulo a doble altura cuenta con una ligera escalera metálica y en el altillo, una barandilla ofrece protección. Pero este es un espacio complementario al que más adelante se le pueden dar muchos más usos, como despacho o zona de estudio. Menos conveniente por su situación, poco íntima, sería convertirlo en un dormitorio de invitados.
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Un espacio luminoso y polivalente
“Habitar el volumen. Transformar el plano en volumen habitable y abarcar el espacio. Este ha sido el obsesivo objetivo del proyecto en esta casa en San Sebastián”, afirman desde Pura arquitectura. El altillo, con luz cenital generado por una ventana de tejado de Velux, tiene el uso de zona de trabajo y ocio, gracias a la mesa y el sofá-cama, y cuando se necesita, puede transformarse en habitación de invitados.
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Un decorativo y tranquilo despacho
Begoña Susaeta, el alma mater de Sube Interiorismo, relata que “se decidió dedicar este espacio a despacho para separarlo del resto de las zonas de la vivienda, consiguiendo un ambiente aislado en cuanto al uso y al ruido; al estar en una planta diferente de las zonas de día y de las de noche. Y de paso se aprovechó el espacio abuhardillado”.
Este rincón de trabajo cuenta un buen aislamiento térmico y sonoro y para un mayor confort se decidió instalar una alfombra de KP, que aporta calidez. La mesa de escritorio, por su parte, es de Ethnicraft, y la butaca tapizada, de Crearte Collections.
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En espacios con gran altura, todo es posible
Si vas a poder contar con un altillo de más de dos metros de altura, en él puedes crear los espacios que quieras y necesites, especialmente si la vivienda es de generosas dimensiones. Por ejemplo, en este antiguo pajar reformado por Patrick Genard & asociados se decide instalar un estudio que se emplea también como taller para artesanías y manualidades que, además, cuenta con una gran entrada de luz natural. Todo el mobiliario se hace a medida, adaptándose como un guante al espacio disponible.
Un altillo con este tipo de altura puede albergar de todo: zona para dormir, leer, de deporte, un salón extra…
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Ideal para quedarse ‘colgado’ con la lectura
Egue y Seta transforma una vivienda en Madrid de los años 50 en un piso lleno de imaginativas ideas, como este altillo creado con una estructura a la que se fija una red. De este modo, se diseña un decorativo y singular rincón de lectura.
Por cierto, los altillos suelen tener un pavimento ligero (no tanto como una red) como la madera, los tableros de DM o bien OSB.
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