Si tu casa no cuenta con una orientación luminosa, o vives en una zona geográfica con pocas horas del sol, te resultarán muy interesantes los siguientes consejos e ideas de decoración para multiplicar la luz natural en interiores. Pueden ser pequeñas reformas o trucos sencillos que te ayudarán a conseguir espacios más ligeros y luminosos y también visualmente más amplios.
Y es que la luz natural es imprescindible para nuestro bienestar, en especial ahora que pasamos más tiempo dentro del hogar. Refuerza nuestro sistema inmunológico, mejora nuestro estado de ánimo ya que hace que segreguemos más serotonina, es beneficiosa para nuestra salud visual, y regula nuestro reloj biológico consiguiendo que logremos dormir y descansar mejor.
¿Cuánta luz natural necesita un espacio?
La luz solar que incide en una estancia concreta de la casa viene determinada por numerosos factores: la orientación, la época del año, el momento del día, las condiciones climatológicas, el tamaño de las ventanas, etc.
Para calcular cuánta luminosidad natural es necesaria para un ambiente se puede aplicar una regla que tiene en cuenta el tamaño del espacio. Es decir, se cuantifica la luz natural mínima teniendo en cuenta que las ventanas han de ocupar un área de entre el 10 y el 20 % de la superficie de la habitación. Es decir, si tu salón mide 20 metros cuadrados, las ventanas ha de tener entre 2 y 4 metros cuadrados en conjunto.
Relacionado: Cómo aislar tu casa del ruido exterior (y ganar en bienestar)