Ir al contenido principalIr al pie de página
Es Tendencia

Ideas de decoración

Poco espacio, máximo encanto: crea tu rincón de desayuno perfecto y conviértelo en el lugar preferido de tu casa


Sea como sea tu cocina, necesitas planificar un pequeño espacio en el que desayunar cómodamente y empezar el día con buen pie. ¡Estas ideas son perfectas para llevar a tu casa!


Desayunador en la cocina© Pixel-Shot - stock.adobe.com
14 de octubre de 2025 - 12:07 CEST

Hay rincones de tu casa que son capaces de transformar tu rutina. Se trata de pequeñas zonas que invitan a disfrutar de ciertos momentos del día, como el primer café, y empezar el día con calma. Un rincón para desayunar es uno de ellos. Y es que esta propuesta no necesita ni demasiados metros cuadrados ni un mobiliario demasiado caro: basta con analizar bien su diseño, integrarlo con el estilo de tu cocina y cuidar esos detalles que lo hacen cómodo y acogedor. Si tienes espacio (aunque sea un poco), merece la pena que apuestes por uno. Te sorprenderá lo mucho que puede aportar tanto a nivel práctico como decorativo.  

Cocina con barra de desayunos.© Germán Cabo para Laura Yerpes

Ligera, funcional y casi imperceptible  

Una de las ideas más fáciles de incorporar a tu cocina es prolongar la encimera hacia un lateral, creando una pequeña península en perpendicular. Esta solución no interrumpe la circulación de la cocina, pero ofrece una superficie perfecta para desayunar o tomar algo rápido. Al dejar la parte inferior abierta, como hizo la interiorista Laura Yerpes en esta cocina, sin muebles ni apoyos visuales pesados, ganarás una sensación de amplitud.   

Esa ligereza visual consigue que el conjunto se vea más moderno, y además permite colocar uno o dos taburetes sin que parezca recargado. Es una alternativa muy equilibrada: práctica, estética y perfecta para cocinas alargadas que buscan un punto funcional sin perder coherencia visual.  

Cocina con mesa de desayunos. © Sandra Rojo para Coblonal Interiorismo

Una mesa adosada en cocinas en L  

Si tu cocina tiene distribución en L, puedes aprovechar el primer tramo para colocar una mesa adosada a los muebles. Es una manera de dar continuidad al mobiliario y, al mismo tiempo, generar un espacio informal donde desayunar, trabajar con el portátil o compartir un aperitivo.   

El truco está en elegir una mesa con la misma altura que la encimera. Lo ideal es que sea también en el mismo tono, aunque un acabado en madera como esta propuesta de Coblonal se encargará de aportar calidez. Después solo necesitarás un par de sillas ligeras para que el rincón resulte práctico. Además, esta solución aporta orden visual y aprovecha zonas que muchas veces quedan vacías. 

Cocina con península con zona de desayunos. © Amador Toril para Estudio Raquel González

Barra en la península: doble función y continuidad  

Las penínsulas son excelentes aliadas en la cocina cuando queremos ampliar el almacenaje. Pero, además, pueden convertirse en una barra de desayuno si alargas ligeramente la superficie de la encimera por uno de los lados. De esta forma, tendrás almacenaje por dentro y una zona informal por fuera.   

El resultado es un lugar versátil que no renuncia a nada: por la mañana sirve para desayunar, al mediodía puede ser una superficie extra de apoyo y, al final del día, se transforma en punto de reunión. Mira cómo lo hizo en esta cocina la interiorista Raquel González.  

Cocina con barra de desayunos© Yael Vallés para Laura Martínez

Encimera alargada con acristalamiento hacia el salón  

Cuando la cocina se abre al salón o el comedor mediante un panel acristalado a media altura, puedes aprovechar la encimera como barra de desayunos. Al alargar la encimera unos centímetros hasta el cristal, conseguirás una conexión visual entre ambos ambientes.   

Este tipo de propuestas funcionan muy bien en viviendas contemporáneas porque aportan luminosidad y sensación de amplitud. Mientras desayunas, puedes disfrutar de la luz del salón o conversar con alguien sin salir de la cocina. Esta propuesta de la interiorista Laura Martínez es un gran ejemplo. 

Cocina con isla con zona de desayunos. © Jordi Folch para Brákara Studio

Una barra que se transforma  

Hay rincones que sorprenden por su ingenio, y este es uno de ellos. Imagina una barra de desayuno que, cuando decides proyectar una película, desaparece momentáneamente al bajar un panel donde se proyecta la imagen. Lejos de ser un inconveniente, este sistema convierte el mismo espacio en un área multifuncional.   

Durante el día, la barra cumple su función habitual; por la noche, el panel se despliega y el ambiente se transforma en una pequeña sala de cine doméstica. Esta propuesta del equipo de Brákara Studio es una manera original y positiva de aprovechar cada centímetro sin renunciar al diseño ni a la comodidad. 

Cocina con isla con zona de desayunos. © Coblonal Interiorismo

Isla con encimera extendida a los laterales

Si cuentas con una isla central en la cocina, puedes ganar un rincón perfecto para desayunar con un sencillo gesto como prolongar la encimera hacia uno de los lados. Con unos centímetros extra tendrás espacio para colocar dos taburetes, manteniendo la superficie útil para cocinar. Si vas a reformar la cocina, planifica una encimera más grande, como en esta propuesta de Coblonal Interiorismo; en cambio, si ya tienes tu cocina, puedes plantearte adosar una superficie extra con una madera. 

El efecto visual es elegante y práctico. Al integrar la barra en la isla, todo queda unificado y sin interferir con los flujos del trabajo en la cocina. 

Cocina con mesa de fondo reducido. © Jordi Canosa para Pia Capdevila

Una mesa estrecha junto a la pared  

Que la cocina sea pequeña no significa que haya que renunciar al lujo de contar con una zona de desayunos. Una mesa estrecha, de unos 35 o 40 centímetros de fondo, puede bastar si se coloca junto a una pared.   

Elige un diseño ligero, preferiblemente con patas metálicas o un sobre flotante, para mantener la sensación de amplitud. Los taburetes altos completan el conjunto y, al terminar, pueden guardarse debajo. Este tipo de composiciones encajan muy bien en viviendas urbanas, donde cada centímetro cuenta. Son prácticas, limpias visualmente y aportan ese gesto cálido que marca la diferencia.  

Cocina con barra adosada en la pared.© María Pujol para Pia Capdevila

Una pared desaprovechada que cobra vida  

En muchas cocinas hay paredes sin uso aparente que pueden convertirse en un rincón funcional con solo añadir una barra adosada. Si la acompañas con un papel pintado que la diferencie del resto y una iluminación dirigida, el resultado será sorprendente. Puedes verlo en este proyecto de la interiorista Pia Capdevila.    

La pared se convertirá en un espacio acogedor en el que empezar el día con calma. Además, el juego de materiales creará profundidad y aportará estilo. Asimismo, puedes reforzar el efecto con estantes abiertos para tazas y frascos de cereales: práctica y estética a partes iguales.  

Mueble desayunador. © David Montero para RQH Studio

Un mueble desayunador, la alternativa perfecta  

Cuando el espacio en la cocina no permite incluir una zona de desayuno abierta, la solución es tan creativa como eficaz: un mueble desayunador con puertas escamoteables. A simple vista, parece un armario más, pero al abrirlo esconde una pequeña zona con todo lo que necesitas para empezar el día con buen pie: cafetera, tostadora, vajilla, incluso una balda para los cereales o las galletas.  

Este tipo de muebles sorprenden por su capacidad de organización. Al cerrar las puertas, todo queda oculto y ordenado, sin interferir con el resto de la cocina. Al abrirlo por las mañanas, se convierte en un rincón perfecto para empezar la jornada sin prisas. 

© ¡HOLA! Prohibida la reproducción total o parcial de este reportaje y sus fotografías, aun citando su procedencia.