Aprovechamos el poder refrescante de esta fruta y lo potenciamos aún más -el 90% de su contenido es agua- incorporándole hielo para transformarla en un granizado. Pero el toque original, distinto y algo campestre es el uso del tomillo, una hierba aromática muy habitual en todos los países mediterráneos.
Tarta de manzana, receta clásicaPor Susana Baticón