Estas patatas asadas son una guarnición irresistible. Son pura mantequilla en la boca, se deshacen, pero mantienen su textura y un ligero crujiente. Perfectas para acompañar una carne asada, o una barbacoa, incluso un pescado a la parrilla.
Ingredientes
- 4 patatas medianas
- 60 gramos de mantequilla
- 1 rama de tomillo
- 1 rama de romero
- aceite de oliva virgen extra
- sal
- pimienta negra
- 1 diente de ajo
- 50 mililitros de vino blanco
- 100 mililitros de caldo de verduras
- cebollino
Preparación
- Ponemos en un bol la mantequilla junto con el aceite de oliva virgen extra y lo metemos en el microondas, apenas 20 o 30 segundos, lo justo para que se derrita la mantequilla. Mezclamos bien.
- Lavamos las patatas bien y las partimos, sin pelar. Podemos partirlas en rodajas gruesas si las patatas son un poco grandes o en mitades si son patatas tirando a pequeñas.
- Colocamos las patatas en una fuente y salpimentamos generosamente. Añadimos el tomillo y el romero, previamente picados. Si nos gusta, podemos emplear otras hiervas aromáticas.
- Regamos por encima con la mezcla de aceite y mantequilla, que ya estará líquido.
- Removemos bien para que las patatas queden bien impregnadas por todos los lados.
- Metemos en el horno, que ya debe estar caliente a 220°C y cocinamos durante 15 minutos. Pasado este tiempo, abrimos el horno para dar la vuelta a las patatas y cocinamos otros 5 minutos más.
- Mientras tanto, pelamos el ajo y lo machamos en el mortero hasta reducirlo a una pasta.
- Mezclamos en un bol el vino blanco junto con el caldo de verduras y añadimos el ajo machacado. Mezclamos bien.
- Volvemos a abrir el horno y ahora regamos las patatas con este jugo. Continuamos la cocción durante 15 minutos más o hasta que se haya evaporado el jugo.
- Sacamos las patatas, añadimos un poco de cebollino por encima. ¡Listas para servir!
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