Luana Belmondo conquistó el corazón del Paul Belmondo, hijo del mítico actor francés Jean-Paul Belmondo, y también de los parisinos con su pasión por la cocina. La italiana se ha convertido en una gran embajadora de la gastronomía de su país en París a través de los programas de televisión que ha presentado y también de sus libros de cocina. Su carácter alegre, carisma y buena mano para la cocina la han colocado entre las influencers culinarias más queridas de Francia y en sus redes sociales cuenta con miles de seguidores que disfrutan con sus platos tradicionales que evocan la calidez y autenticidad de Italia.
La pareja (recientemente separada, en 2024, tras 33 años de matrimonio) ha tenido tres hijos, Alessandro, Victor y Giacomo. El mayor, Alessandro, ha seguido los pasos de Luana como cocinero profesional y juntos han escrito un libro y protagonizado un documental familiar, Belmondo, l’Italie en héritage, donde recorren Italia descubriendo tradiciones culinarias, elaborando pasta fresca y compartiendo sus técnicas más auténticas.
COCER LA PASTA 'AL DENTE' Y OTROS CONSEJOS ESTRELLA DE LUANA BELMONDO
En Italia, la pasta no es solo un plato: es una forma de vida. Y nadie lo representa con más autenticidad y alegría que Luana Belmondo, conocida cariñosamente en redes como Luana Pasta. Esta cocinera apasionada y amante de la vida sencilla, lleva años demostrando que se puede comer pasta todos los días sin miedo a la báscula… si sabes cómo cocinarla. Su lema sentencia esta idea: “La pasta non fa ingrassare. È il modo sbagliato di cucinarla che lo fa.” ("La pasta no engorda. Lo que engorda es cocinarla mal.").
La pasta no tiene secretos para Luana, quien hace unos días compartía en su cuenta de Instagram algunos trucos y consejos del cocinero italiano afincado en París, Denny Imbroisi, para poder comerla “todos los días al mediodía sin engordar, como hacen los italianos". En el vídeo, el chef de Calabria recopila unos tips para cocinar la pasta que forman parte de la sabiduría popular y la cocina casera pero que, fuera de Italia, se han ido perdiendo o transformando. Por su parte, Luana coincide plenamente con los consejos del chef y ofrece, además, 10 trucos infalibles:
1. PASTA 'AL DENTE'
La primera recomendación es "comer la pasta 'al dente'. Contiene menos agua, por lo que la digestión será mucho más rápida", explicó el chef. En ese mismo vídeo, Imbroisi precisó que no hace falta seguir al pie de la letra el tiempo de cocción indicado en el paquete y aconsejó escurrir la pasta “tres minutos antes”. ¿Por qué? "De ese modo, su pico de insulina no se disparará y almacenará menos grasas", señaló. Luana añade: “La pasta demasiado cocida no solo pierde sabor y textura… ¡sino que engorda más!”. Cocerla 'al dente' reduce su índice glucémico, "lo que significa que tu cuerpo la digiere más lentamente y no dispara tanto el azúcar en sangre", recalca.
2. MUCHÍSIMA AGUA
“La pasta necesita espacio para moverse”, dice Luana. Lo ideal es 1 litro de agua por cada 100 g de pasta. Así no se pega y se cuece de manera uniforme.
3. POCA SAL... PERO BIEN ECHADA
La sal se añade solo cuando el agua hierve a borbotones, nunca antes. Y debe ser sal gruesa. Luana echa una cucharada sopera colmada por cada litro y medio de agua.
4. JAMÁS ACEITE EN EL AGUA
Este es un mito francés, según Luana. “¡Aceite en el agua no! La pasta debe abrazar la salsa, y el aceite crea una película que lo impide”.
5. NO LAVAR LA PASTA CON AGUA
Nada de escurrir bajo el grifo. El almidón que queda en la pasta ayuda a que la salsa se adhiera mejor. Eso sí, no hay que dejarla enfriar. Luana aconseja: "la pasta va directa del colador a la sartén".
6. COCER LA PASTA EN LA SALSA
Un truco clave: los últimos 30 segundos o 1 minuto de cocción, la pasta se termina dentro de la sartén con la salsa. Así se impregna del sabor y queda ligada, como en los restaurantes italianos.
7. AGUA DE COCCIÓN: EL ORO LÍQUIDO
Nunca tires toda el agua de cocer. Luana guarda un cazo para añadir a la salsa si queda muy seca. El almidón del agua ayuda a crear esa textura cremosa natural.
8. PORCIONES REALES
En Italia, nadie se sirve media olla de pasta. Luana aconseja raciones equilibradas: 80-100 g por persona. Lo importante es lo que acompaña, no la cantidad.
9. NADA DE NATA
“La nata no es italiana”, repite con humor. Para salsas cremosas, Luana prefiere ligar con agua de cocción, parmesano o un toque de ricotta.
10. PASTA SÍ... PERO CON EQUILIBRIO
La clave italiana es el equilibrio. Pasta en porciones razonables, acompañada de verduras, proteína ligera y una vida activa. “Pasta tutti i giorni, ma con testa”, dice Luana (pasta todos los días, pero con cabeza).