Carlos Larrañaga y Ana Escribano se casaron el jueves a las doce y media de la mañana en una íntima ceremonia civil en el juzgado de paz de la localidad madrileña de Torrelodones. La novia, embarazada de seis meses, llevaba un traje crudo de Ángel Schlesser de escote cuadrado y corte imperio, adecuado para disimular su avanzado estado de gestación. Como complemento, llevaba un colgante con un pequeño brillante y un pequeño ramo, un bouquet formado por rosas blancas. El actor, por su parte, vestía un traje de color gris, con una corbata en los mismos tonos de Hermès.
Su cuarta boda El enlace fue tan inesperado como sencillo, ya que sólo acompañaron a la pareja Petra Martínez, la madre de la novia, que actuó como testigo de Ana, y José Luis Alonso, uno de los abogados de Carlos que ejerció también de testigo. Este es el primer matrimonio de Ana Escribano, que dará a luz a Paula, primera hija de la pareja, el próximo mes de enero, y segunda para Ana que ya tiene otra niña, de dos años, de una relación anterior. Para Carlos, sin embargo, es su cuarto enlace, tras haber contraído matrimonio con María Luisa Merlo, Ana Diosdado y María Teresa Ortiz Bau, de quien intenta ahora obtener la nulidad eclesiástica para reafirmar su amor por Ana frente al altar.
De momento, la luna de miel tendrá que esperar porque Carlos se incorpora al elenco de actores de la nueva película de José Luis Garci, que ya ha comenzado su grabación en tierras asturianas. Allí compartirá cartel con Paula Echevarría y Álex González, entre otros.
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