Tras el verano... ¡mime también su cabello!

Mascarillas y cremas reparadoras se convierten en un aliado indispensable para luchar contra el pelo seco y estropeado

Por hola.com

Nadie duda de que el sol que nuestro cabello recibe durante las vacaciones contribuye a dejarlo muy seco y, como consecuencia, frágil y poroso. Para compensar este sufrimiento, conviene usar productos que lo reparen desde dentro. Por tanto, hay que usar champús nutritivos, específicos para cabello dañado. Pero son también muy necesarios los productos complementarios, como mascarillas o cremas reparadoras, imprescindibles para una reparación a fondo y a largo plazo.

  • Las mascarillas pueden multiplicar sus beneficios si se mantienen durante el mayor plazo posible. Y, aún mejor, si se usa calor para que el cabello reciba mejor los activos. Eso se consigue con algo tan fácil como un gorro de ducha: basta con extender la mascarilla de medios a puntas (a no ser que se tenga el cabello muy seco, es mejor evitar la raíz) y después, cubrirse la cabeza con él durante un mínimo de 15 minutos. Mascarillas como Age Recharge de Kerastase fortalecen el cabello desde el interior.
  • Los reparadores y productos reestructurantes se aplican tras el lavado, sobre el cabello secado con toalla. Fortalecen la fibra capilar, aunque pueden resultar algo pesados para el cabello muy fino o graso. Su acción es progresiva, y son excelentes como tratamientos intensivos. Redken propone su gama Extreme, destinada a recuperar cabellos fragilizados. L’Oréal Professionnel cuenta con un spray inmediato de efectos garantizados, Power Color: se aplica tras el champú, y no sólo desenreda y da brillo, sino que además fortalece el pelo desde la raiz. Dentro de la peluquería no se puede olvidar un clásico de enorme eficacia: Potion 9 de Sebastian, que actúa como si fuera una crema hidratante para el cabello dañado. Para suavizar en profundidad, Schwarzkopf apuesta por su Tratamiento Hidratante, en monodosis y rico en aloe vera.