Cómo frenar la caída del pelo

Con la llegada del otoño, aumenta la pérdida de cabello

Por hola.com

Parece que son dos hechos obligados a ir parejos: otoño y caída del cabello. Con el cambio de estación, surge de nuevo el problema: al terminar de lavar la cabeza la cantidad de pelo amontonada en la ducha es alarmante. Para muestra, un dato: ¿sabía que cada día se pierden cerca de 100 pelos? Y es que, para adaptarse al otoño, el cuerpo experimenta una serie de cambios hormonales que podríamos decir que tienen efectos secundarios para el cabello, que se vuelve inevitablemente más frágil. La consecuencia es que se acelera la caída del pelo.

Las causas de esta caída pueden ser el envejecimiento, las dietas poco equilibradas, los cambios hormonales, el estrés, los diferentes trastornos del organismo, las noches en vela, un uso excesivo del secador o la contaminación, entre otros factores.

Ante los casos más extremos de caída del cabello, lo más conveniente es acudir a un médico especialista, que pueda atajar a tiempo el problema. Pero no se asuste, pues normalmente la caída es estacional y no debe alarmarle. Basta con seguir una serie de consejos útiles que ayudan a frenar esta caída ocasional. Para paliar el problema, los especialistas afirman que la prevención es fundamental. Así, el estilista Alberto Cerdán en su último libro recalca que "es importante anticiparse y usar champús naturales que contengan en su composición extractos de plantas medicinales y sustancias activas de manzanilla". Así se consigue relajar el cuero cabelludo. Existen, además, una serie de recomendaciones básicas para frenar la caída del cabello:

  • usar un champú adecuado con proteínas y vitaminas, con el que se debe dar un suave masaje al cuero cabelludo
  • no hacer un mal uso de la toalla al secar el cabello, pues no se debe restregar sobre el pelo con fuerza y nunca debe estar demasiado húmeda
  • además, hay que proteger el cabello del viento y el sol
  • se deben evitar la trenzas y los recogidos: lo ideal es llevar el pelo suelto
  • evitar las permanentes
  • cuidar la alimentación, aumentando el consumo de proteínas, minerales y vitaminas.
  • usar el secador con moderación, evitando que esté demasiado cerca del cabello para no quemarlo
  • cuando la pérdida es considerable, es conveniente el uso de mascarillas específicas, cápsulas y lociones indicadas, precisamente, para prevenir la caída del cabello.