Retinol: respondemos las preguntas más frecuentes sobre el activo cosmético de moda

Todo lo que necesitas saber sobre uno de los ingredientes más buscados del momento

Por Elisa García Faya

Si hay un activo que goce ahora de gran popularidad (al margen del vivo debate en torno a la vitamina D y de la siempre reina de la fiesta, la vitamina C) ese activo es el retinol. Gracias también a las redes sociales, este ingrediente ha terminado por ser aclamado y temido a partes iguales (pues no todos los productos con retinol funcionan ni todas las pieles lo toleran de la misma forma). Y, ahora que la Unión Europea quiere regular su uso en cosmética, es lógico que no se deje de hablar de él. Por eso, es normal que a la hora de utilizarlo (y sobre todo, cómo hacerlo) puedan surgirte muchas dudas, no sólo sobre cuáles son sus beneficios, sino también sobre si está indicado para tu piel. Así, con los consejos de los expertos con los que hemos contado a lo largo de este artículo, ponemos los puntos sobre las íes, para que por fín consigas despejar todas las incógnitas acerca de cuándo sí, cuándo no, para quiénes y por qué motivos. Aquí tienes todo acerca del retinol.

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¿Qué es y para qué sirve el retinol?

El retinol proviene de la amplia familia de los retinoides, un grupo de sustancias derivadas de la vitamina A cuya principal característica es que son capaces de transformar la piel por su alto poder antioxidante y antiedad. Al ser un compuesto natural esencial que interviene en muchos procesos biológicos, tiene además otros beneficios. Descúbrelos.

¿Cuál es el efecto del retinol en la piel?

Entre los principales beneficios del retinol destacan:

  • Ayuda a suavizar la textura de la piel
  • Minimiza la apariencia de los poros 
  • Atenúa visiblemente las líneas de expresión y las arrugas
  • Iguala el tono y textura de la piel
  • Aporta luminosidad

Todos estas estas ventajas han sido avaladas por la comunidad científica. De hecho, según la doctora Marta García-Legaz, dermatóloga y divulgadora médica del Instituto Médico Ricart (IMR), sí es cierto que "el retinol está considerado el activo antiedad más potente". La experta asegura que "es uno de los ingredientes más demandados en todos los productos de dermocosmética que afirman que pueden regenerar por completo la piel". Sin embargo, advierte de la necesidad de tener presentes una serie de consideraciones, ya que este cosmético no es apto para todo tipo de pieles porque puede irritarlas o provocar rojeces. Además, la mayoría de los expertos recominedan que, para que esto último no pase, lo mejor es empezar  aplicarlo poco a poco, de uno a tres días por semana e ir subiendo o bajando su uso en función de cómo responda nuestra dermis.

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¿Qué no se puede mezclar con el retinol?

En general, cualquier cosmético que genere una exfoliación en la piel, ya sea a través de ácidos o de manera mecánica. Además, es importante no excederse con este paso de la rutina de belleza en los días posteriores y sobre todo durante la etapa de adaptación. Debido a que el activo ya realiza un proceso de renovación, los peelings que se suelen aplicar de noche tampoco estarían recomendados el mismo día en el que se aplique el retinol. 

Marta García-Legaz añade que, "al penetrar en las capas más profundas de la piel, termina por mejorar la capa más externa mediante la aceleración del proceso de renovación celular". Aunque, a priori, de esto solo se deriven cosas buenas, según la doctora "debemos considerar que, a mayor concentración de retinol, más posibilidades se tienen de sufrir rojeces, descamación o irritación cutánea". "Esta alteración se puede agravar en verano a causa del cloro de la piscina, la sal marina o el exceso del sudor. Además, la mayor exposición solar, aunque nos protejamos, tampoco ayuda", avisa la especialista.

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¿Cuándo es recomendable empezar a usar retinol?

Como explican los expertos, hablamos de un potente activo antiedad por lo que el momento recomendado para comenzar a incluirlo en la rutina es, precisamente, aquella en la que comiencen a aparecer los primeros signos de envejecimiento. Aunque también funciona como un excelente retexturizador de la piel, controla los brotes de acné y previene la formación de nuevas espinillas, por lo que se puede recurrir a él cuando aparecen este tipo de problemas pero siempre bajo la supervisión de un dermatólogo. 

Por otro lado, García- Legaz recuerda que "las pieles más sensibles y delicadas deben prestar especial atención a la hora de utilizarlo ya que este activo puede resultar muy irritante". Con todo y con ello, antes de utilizar cremas, sérum o ampollas que contengan retinol, tienes que tener en cuenta que:

  • Debe hacerse siempre de noche y a la mañana siguiente realizar una limpieza exhaustiva del cutis. Si se usa por la mañana hay que proteger la piel muy bien y conviene, antes de nada, consultar con el dermatólogo para evitar irritaciones.
  • Siempre se debe hacer uso de fotoprotector, aunque sea invierno y a penas luzca el sol, ya que puede ocasionar hiperpigmentación.

¿Qué se pone primero el retinol o la crema hidratante?

En cuanto al orden correcto a la hora de utilizarlo, depende: si se incluye en la rutina en forma de sérum, primero se utiliza el retinol y después la crema hidratante. Sin embargo, existen algunas cremas hidratantes que lo incluyen en sus fórmulas, por lo que se aplicarían como último paso. Como nota importante, recordamos que el uso del fotoprotector diario se vuelve aún más importante cuando se recurre a este activo antiedad. 

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¿Cuánto tiempo se debe dejar el retinol en la cara?

Por norma general y como el retinol se suele incluir en fórmulas específicas para el ritual de belleza nocturno, habrá que dejar que actúe durante toda la noche.

Uno no es mejor ni peor que el otro, de hecho, los especialistas insisten en la importancia de dar con una rutina a medida que responda a las necesidades específicas de cada piel. Y es que, si hablamos de que el retinol es un activo antiedad que reduce las líneas de expresión o arrugas y mejora la textura de la piel, el ácido hialurónico destaca por su reconocido beneficio hidratante al ser capaz de retener hasta 1000 veces su propio peso en agua. Por lo tanto, cada ingrediente ha demostrado sus capacidades a la hora de conseguir resultados eficaces y habrá que elegirlos en función de cada caso particular. 

Por último, no hay inconveniente en el uso del retinol si no estás embarazada. Durante la gestación, el retinol se desaconseja por riesgo de malformación congénita. Deberás, eso sí, escoger los productos que contengan una concentración de retinol que te pueda venir bien. La farmacéutica Meritxell Martí, nos dice lo siguiente:

  • Las concentraciones más habituales son 0,25%; 0,50% y 1%: como el retinol es irritante, empezaremos por una concentración baja hasta que la piel se vaya acostumbrando.
  • Tan importante es la concentración como la emulsión o vehículo de ese retinol: no es lo mismo un retinol en un sérum que una crema que sea más densa, donde será mucho más oclusivo. 
  • Hay que tener en cuenta qué otros ingredientes lleva la fórmula: no es lo mismo un retinol combinado con otros alfa hidroxiácidos de función exfoliante, que un retinol acompañado de ingredientes que apaciguen esa irritación que puede hacer el retinol. En este último caso destaca el retinol con niacinamida, centella asiática o extracto de regaliz. 

De esta forma, una piel resistente podría empezar con un retinol de un 0,5%, mientras que una piel muy sensible tendría que hacerlo por un 0,25%. La piel, poco a poco, se irá acostumbrando al ingrediente pero este nunca va a dejar de ser efectivo. Así como hay otros que dejan de hacer efecto, al retinol no le sucede esto. Esto quiere decir que podemos mantener una misma concentración en nuestra rutina, según indica Meritxell, por mucho tiempo. "No es lo mismo costumbre que tolerancia", recuerda la experta. 

Al margen de todas estas cosas, recuerda que como en deporte y nutrición, en lo que atañe a la piel, lo mejor es contar con una rutina personalizada diseñada por un experto. Solo los profesionales sabrán indicarte si el retinol, como otros ingredientes, es pertinente en tu caso.