¿Son más comunes unos aromas que otros? ¿Cambian nuestros gustos dependiendo de la zona en la que vivamos? La respuesta es 'sí', ya que parece que se pueden diferenciar qué olores son los favoritos de los españoles según la comunidad autónoma en la que residen. Así lo dice un estudio elaborado por La Botica de los Perfumes, que ha permitido elaborar un ‘mapa olfativo’ que pretende ser una guía de los olores, estableciendo un denominador común para cada comunidad. Eso sí, no está orientado a descubrir las notas de una fragancia sino a determinar qué notas son las más utilizadas en distintas regiones de España. ¿No tienes curiosidad? ¡No te lo pierdas!
¿Cómo han llegado a esta conclusión? De sus más de 145 tiendas distribuidas por todo el territorio, han extraído datos sobre los hábitos de compra y elección de aroma por cada comunicad para elaborar los siguientes estereotipos aromáticos, ¡toma nota!
- Andalucía es sinónimo de notas florales. Sus ciudades huelen a flores en estos meses de primavera. Así, no es extraño que allí prevalezcan los gustos por los olores a azahar, rosa blanca, jazmín o la biznaga. La elección para la fragancia de la mujer andaluza está marcada por la presencia de este tipo de notas en el perfume, mientras que para el hombre el romero o el incienso son dos de las notas imprescindibles.
- El Levante español, por su parte, tiene claras sus preferencias por las fragancias con notas frutales. Especialmente los cítricos como la naranja, el limón o la mandarina. Otras como el pomelo o la sandía son notas menos frecuentes pero también están presentes en sus elecciones. Llama la atención que tanto para la mujer como para hombre, la preferencia en las notas de salida coincidan.
- ¿Y en las dos Castillas? En Castilla-La Mancha tienen preferencia en su mayoría por notas de plantas aromáticas, como el romero, tomillo, lavanda o mejorana, tanto de mujer como las de hombre. Castilla y León recurre también a olores típicos en sus campos como el romero, el tomillo, la manzanilla y también las notas suavizadas de pino. Hombres y mujeres comparten el gusto por las fragancias con toques de hierbas aromáticas tanto en la salida como en el fondo.
- En Galicia prefieren la mezcla de notas frutales con florales y algo de madera. La madera húmeda, impregnada con jazmín y cítricos como la mandarina es un perfecto ejemplo de lo que busca la mujer gallega en un perfume, aunque lo importante para ella es que alguna de estas notas se encuentre en su fragancia si no pueden estar juntas. El gallego apuesta más por las notas de madera y cítricos verdes como la lima.
- Madrid tiene mucha más mezcla. Las madrileñas eligen perfumes con notas florales entre las que destacan las rosas blancas, el azahar, el clavel y las mezclan con notas cítricas como la bergamota, el pomelo y especias como la pimienta. Los madrileños son hombres con preferencias por notas más amaderadas y en las que el vetiver o el pachuli son otras alternativas.
- Y en Cataluña, la lavanda o el tomillo como notas de plantas aromáticas se combinan con otros aromas florales como los de rosas o lirios para hacer las fragancias favoritas de la mujer catalana. Aunque los toques dulces como la canela y la vainilla también son muy demandados. El hombre prefiere los toques más amaderados y su mezcla con bergamota dentro de la gama cítrica. El vetiver o el sándalo son otras dos notas que ocupan puestos de privilegio.
- También nos dan datos del País Vasco, un territorio de fragancias con aromas naturales y notas de rosa mosqueta, tomillo o camomila. Se mezclan con otras notas más dulces provenientes de la canela, siendo las elegidas principalmente por las mujeres. Los vascos por su parte se decantan por aromas cítricos y frescos, con protagonismo para la lima o la bergamota. También las maderas como el cedro, el sándalo o el vetiver se utilizan con otras maderas de aroma más intenso como el cuero.
