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Son las primeras en estrenar las tendencias que más tarde conquistan al mundo entero, aunque no siempre les sale bien: aunque recordemos "el Rachel" del que Jennifer Aniston se arrepintió en la primera temporada de Friends y después se convirtió en historia de la peluquería que sigue inspirando cambios de look a día de hoy. Suelen acertar casi siempre, pero a veces ya sea por exigencias del guion, probar algo diferente o simplemente porque con el tiempo descubren qué es lo que les favorece, eligen un corte o peinado que no encaja con su imagen.
Analizamos cuáles son las características de un buen corte rejuvenecedor: desde el largo hasta la forma, comparando looks de algunas de las estrellas, de Angelina Jolie a Jessica Chastain.
El largo
Sí, el pelo largo está considerado como bonito y las melenas XXL bien cuidadas son un sueño, pero no a todas nos sientan igual. Un largo excesivo y sin forma puede arrastrar la apariencia del rostro visualmente hacia abajo, dando una sensación de pesadez. Esto es especialmente evidente cuando las melenas pasan de la mitad de la espalda.
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© Getty ImagesPara que sea favorecedor, el consejo ideal es que el pelo sea manejable y tenga movimiento. A pesar de que las tendencias nos intentan colar largos extremos, lisos y muy pulidos, no dejan de ser opciones del todo arriesgadas. Así como las melenas XXL con volúmenes extremos. Si quieres un largo ideal, opta por cortes que lleguen hasta los hombros o un poco más largos con capas, pueden dar un aspecto más fresco y juvenil.
El estilo y la forma del corte
Los cortes sin forma definida o excesivamente estructurados pueden ser también una opción poco certera. Un ejemplo muy común son los bob ultra rectos hasta la mandíbula sin capas, que pueden enfatizar líneas duras y arrugas en el rostro dependiendo de las características de la persona. Porque, sí: también hay que tener cierta actitud para llevar determinados cortes.
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© Getty ImagesSi hablamos de peinados, sucede lo mismo: cuando son demasiado pulidos o peinados hacia atrás tienden a endurecer los rasgos faciales. Y cuando el volumen se sale de control, pueden también llegar a crear cierta imagen envejecida. En su lugar, opta por la naturalidad: cortes con movimiento y capas suaves, que enfaticen la textura natural y den ese aire de juventud tan deseado.
El flequillo
Otra opción que, cortada sin valorar previamente los rasgos, es de alto riesgo. El flequillo, cuando se elige correctamente, puede rejuvenecer; pero cuidado porque si es demasiado pesado o muy corto, puede lograr el efecto opuesto, destacando las líneas de expresión.
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© Mike Marsland/WireImageFlequillos rectos y gruesos tienden a ser menos favorecedores, así como los flequillos demasiado pobres y muy desfilados. ¿Lo mejor? Déjate asesorar por los profesionales. Sus conocimientos en visagismo harán que no metas la pata por mucha tendencia que te guste…
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© Getty ImagesEl color del tinte
El color es otra herramienta poderosa para influir en nuestra imagen. Los colores muy oscuros tienden a endurecer las facciones y pueden hacer más notorias las arrugas o imperfecciones. En cambio, optar por tonos más claros o añadir reflejos puede aportar luminosidad al rostro, siempre y cuando los tonos no sean demasiado fríos y apagados. Los tonos caramelo y rubios cálidos suelen ser añadir luz al rostro, pero es importante valorar previamente con el tono de piel para que la teoría del color (también en tu pelo), funcione.
Peinados desactualizados
Algunos peinados que estaban de moda en ciertas décadas pueden actualizarnos considerablemente hacia atrás y no en el buen sentido. Peinados con demasiado volumen en la parte superior, como el bouffant o aquellos excesivamente lacios y sin forma pueden echarnos años por encima. Elegir estilos que permitan a la melena lucir saludable y natural es clave. ¿Los mejores? Las ‘beach waves’ o rizos suaves y desordenados siempre van a funcionar.
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