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Los años no pasan en balde eso está claro. A medida que nos vamos haciendo mayores nuestro organismo comienza a disminuir la producción de determinadas proteínas, como son el colágeno y la elastina, lo que provoca que nuestra piel pierda brillo, elasticidad y firmeza dando lugar a la aparición de las primeras arrugas. Las odiadas patas de gallo, así como las líneas de expresión en frente y comisura de los labios son las primeras en aparecer. Aunque su llegada es algo inevitable existen determinados hábitos saludables que pueden ayudarte a retrasar su aparición y a mejorar el aspecto de las ya existentes.
Si como la presentadora Eva González tu problema está, principalmente, en las arrugas que aparecen bajo los ojos, síntomas que, a priori, se producen por la fatiga y falta de sueño, pero que acaban marcándose cada vez más y dan lugar a un rostro envejecido y cansado, estos consejos te interesan.
Aprendiendo a cuidar tu piel
- Lo primero y más importante consiste en llevar a cabo una sesión de limpieza exhaustiva. Desde una exfoliación semanal para retirar la piel muerta hasta desmaquillarte a diario, y no de cualquier manera. Deja tus toallitas para momentos puntuales como pueden ser viajes exprés o noches en las que llegas a altas horas de la madrugada para apostar por tónicos y leches desmaquillantes así como por agua micelar. No olvides tampoco lavar tu rostro con agua y jabón natural.
- En lo que respecta a la hidratación, tu piel te pedirá un cambio de productos. Es hora de comenzar a usar fórmulas antiarrugas, sobre todo, por la noche. Y es que es precisamente en este momento del día en el que este paso se vuelve fundamental ya que estas fórmulas ayudarán a la regeneración celular y fomentarán la nutrición profunda de la piel durante el sueño. Pero, ¡ojo! esto no significa que puedas prescindir de la crema de día. Además es conveniente que apuestes por el contorno de ojos, uno de los productos beauty más olvidados del neceser femenino.
- Evitar, en la medida de lo posible, la exposición directa al sol retrasará el envejecimiento de la piel, así como aplicarte cremas o maquillajes con protección solar a diario. Este punto es básico independientemente de la época del año que sea.
- ¿Quieres ir más allá? Prueba con la mesoterapia. Esta técnica se convierte en una de las opciones estéticas más accesibles para mejorar nuestro aspecto. Se trata de pequeñas infiltraciones de sustancias como ácido hialurónico, vitaminas y oligoelementos que combaten el envejecimiento facial y promueven la regeneración celular. Además te aportarán también una hidratación profunda y te ayudarán a combatir la flacidez de rostro y cuello. Este tratamiento está destinado a personas jóvenes o de mediana edad con piel deshidratada, envejecimiento facial ligero, arrugas finas y flacidez ligera. Su periodo de duración es de un par de meses, tiempo que puede variar en función del paciente y sus cuidados de la piel.
- Por último, además de la parte estética encontramos una opción más para ver tu rostro más joven, relajado y sin arrugas: el yoga facial. Practicando esta disciplina cinco días por semana, preferiblemente por la mañana, conseguirás relajar los músculos faciales y oxigenar la piel.
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