La Vespa velutina, conocida popularmente como avispa asiática o velutina, ha vuelto a colocar a Galicia en el centro de la atención mediática tras los trágicos fallecimientos de tres personas en la región.
Esta especie invasora, originaria del sudeste asiático, ha logrado expandirse con rapidez por Europa, donde su presencia no solo representa una amenaza para la apicultura y la biodiversidad, sino también un riesgo real para la población humana, especialmente para quienes padecen alergias al veneno.
La avispa asiática se caracteriza por su cuerpo oscuro, con bandas claras en el abdomen, y un tamaño considerable que la hace fácilmente reconocible frente a otras especies autóctonas.
Su actividad predatoria sobre las abejas autóctonas ha generado alarma entre los apicultores, ya que la destrucción de colmenas pone en riesgo la producción de miel y el equilibrio de los ecosistemas locales.
Sin embargo, los recientes sucesos mortales han trasladado la preocupación al ámbito de la salud pública, mostrando que los ataques de velutina pueden ser letales, sobre todo en personas con reacciones alérgicas graves.
En Galicia, los nidos suelen localizarse en árboles altos o en áreas húmedas, y presentan un tamaño notable, con forma globular y una entrada lateral.
Si bien estas avispas no son agresivas por naturaleza, se defienden de manera rápida si perciben una amenaza cercana a su nido.
La combinación de nidos situados en zonas entre la ciudad y el campo, y la aproximación accidental de personas ha provocado situaciones de riesgo.
Los especialistas advierten que el peligro principal no radica en la fuerza de la picadura, sino en la respuesta del organismo al veneno, especialmente en casos de anafilaxia, donde la intervención médica inmediata puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte.
Las autoridades recomiendan precaución, evitar acercarse a los nidos y, en caso de encontrar uno, contactar únicamente con equipos especializados.
Apicultores y servicios públicos de control de fauna cuentan con trajes protectores y técnicas específicas para eliminar los nidos de manera segura, evitando ataques masivos que podrían poner en riesgo a vecinos y trabajadores.
¿Especie invasora?
El avance de este tipo de avispa por tierras gallegas y otras zonas del norte de España se explica por la ausencia de depredadores naturales, el clima favorable y la intervención humana en el transporte de materiales que permiten su expansión.
Por ello, la vigilancia ciudadana y la concienciación sobre los riesgos asociados son fundamentales. Identificar los nidos, mantener distancia y conocer los protocolos de actuación ante picaduras se convierten en medidas esenciales para proteger tanto a personas como a ecosistemas.
Aunque la aparición de la velutina ha generado alarma, también ha servido para reforzar la importancia de la prevención y la educación sobre especies invasoras.
Galicia se enfrenta a un desafío que combina ecología y salud pública, y la colaboración entre autoridades, apicultores y ciudadanos será clave para minimizar riesgos y convivir de manera más segura con esta inesperada vecina del norte de España.





