¿Te imaginas recibir una llamada de tu operadora informándote de que tu tarifa se va a disparar de 20 a 100 euros? Parece una pesadilla, pero es un engaño que está ganando terreno entre los ciberdelincuentes. En los últimos años, las estafas telefónicas en España han evolucionado, y los delincuentes han perfeccionado sus técnicas, incluso utilizando inteligencia artificial (IA) y deepfakes para hacer sus fraudes mucho más convincentes.
Un incremento alarmante de las estafas
Las cifras hablan por sí solas. Según un informe de ESET España (compañía de software de ciberseguridad), el 28% de las llamadas que recibimos son intentos de fraude o spam. Esto significa que, en promedio, 3 de cada 10 llamadas que contestamos podrían ser un intento de estafa.
Y no se trata solo de llamadas extrañas. El 35,52% de los españoles asegura haber recibido mensajes con enlaces fraudulentos, y casi el 30% ha caído en algún intento de fraude a través de WhatsApp.
Finetwork, la operadora española de fibra y móvil ha lanzado una alerta sobre las nuevas formas de fraude que están afectando a miles de usuarios, y ha puesto a disposición de los consumidores una serie de herramientas y consejos para identificar estos engaños.
¿Qué nuevas modalidades de estafa están de moda en 2025?
Hay que tener en cuenta que ya no se trata solo de llamadas fraudulentas genéricas, ahora los ciberdelincuentes emplean herramientas sofisticadas como la inteligencia artificial para hacer que sus fraudes sean más convincentes y difíciles de detectar. En 2025, las estafas están más avanzadas que nunca, y conocer cómo operan es crucial para protegernos.
A continuación, te contamos algunas de las modalidades más comunes este año:
Falsas llamadas sobre subidas de tarifas
Esta es una de las estafas más recientes y peligrosas. Los delincuentes se hacen pasar por empleados de tu operadora y te informan de un aumento de tarifa desmesurado, como un incremento de 20 a 100 euros. El objetivo es crear pánico en el usuario, quien, por miedo a perder su servicio o enfrentar un aumento real, acaba aceptando cambios fraudulentos o proporcionando datos personales.
Estafas a través de WhatsApp
Muchas veces las estafas empiezan con una llamada aparentemente inocente de un reclutador de recursos humanos. Te piden que agregues un número de WhatsApp para hablar de una oferta de trabajo. Sin embargo, una vez que inicias la conversación, el objetivo real es obtener tus datos personales para futuros fraudes o, en algunos casos, pedirte dinero bajo algún pretexto.
Suplantación de identidad (deepfake de voz)
Los ciberdelincuentes ya no se conforman con una llamada común. Ahora utilizan inteligencia artificial para imitar la voz de personas cercanas a ti, como un amigo o incluso un familiar. A través de estas llamadas, crean una historia, un problema médico o un lío legal y te piden dinero con urgencia.
Notificaciones fraudulentas de grandes servicios
Amazon, Netflix, eBay... Los delincuentes clonan la identidad de estos grandes sitios web para enviarte notificaciones falsas. Estas comunicaciones son tan realistas que es fácil caer en el engaño. Si sigues los enlaces, puedes ser redirigido a sitios fraudulentos donde te pedirán tus datos personales o incluso te harán compras sin tu consentimiento.
El fraude "wangiri"
Esta modalidad, cuyo nombre proviene del japonés "llamar y colgar", consiste en realizar llamadas perdidas desde números desconocidos, generalmente internacionales. Al devolver la llamada, el usuario es redirigido a líneas de tarificación especial, generando cargos elevados sin que se dé cuenta.
La falsa llamada de "tu banco" (Spoofing)
Esta es otra forma de engaño en la que los estafadores falsifican el número de teléfono que aparece en tu pantalla. Así, parecen estar llamando desde una entidad bancaria o incluso desde la administración pública. Una vez que han ganado tu confianza, te piden información personal o te inducen a realizar transferencias de dinero.
¿Cómo protegerse?
Afortunadamente hay formas de protegerse y una de ellas es el método LAP, una estrategia de prevención impulsada por la Policía Nacional, que se basa en tres criterios clave:
1. Localización: identifica el origen de la llamada o mensaje. Si proviene de un número desconocido, especialmente con prefijos internacionales extraños (y no es el +34 de España), no respondas ni accedas a los enlaces que te envíen. Verifica siempre la autenticidad de la fuente.
2. Autor: antes de dar cualquier información, confirma la identidad del remitente. Si te dicen que es tu banco o un familiar en apuros, contacta por otro medio (como una llamada directa o un mensaje) para comprobar que realmente es la persona que dice ser.
3. Propósito: evalúa el motivo de la comunicación. Si te piden dinero o información personal, o hay un tono de urgencia inusual, sospecha. Recuerda: las entidades oficiales nunca te solicitarán datos sensibles de forma tan urgente o a través de canales no seguros.
Ten presente que las estafas telefónicas están más al día que nunca, y los delincuentes están utilizando tecnologías cada vez más avanzadas para engañarnos. Con un poco de precaución y siguiendo las recomendaciones de expertos, podemos reducir el riesgo de caer en estos fraudes. ¡Mantente siempre alerta y protege tus datos!