Iñaki Gabilondo, una de las voces más influyentes del periodismo nacional, recordó la grave enfermedad que casi le cuesta la vida hace 21 años en el programa En primicia, conducido por Lara Siscar en La 2. "Pasé un cáncer además muy malo, a mi mujer le dijeron que tenía un 70 por ciento de posibilidades de no salir. Pasé todo el protocolo, o sea, la radioterapia, operación brutal, quimioterapia, todo el festejo ese", contó con total sinceridad.
El periodista fue diagnosticado de cáncer de colon en 2004 y, a pesar de la gravedad de la situación, decidió seguir adelante con el programa Hoy por Hoy, de la Cadena Ser. "Pasado el tiempo en el que estuve absolutamente inutilizado, el resto del recorrido, incluyendo la quimio, la hice ante el micrófono", señaló. "A mí me ayudaba eso, el tener que hacer el programa. Aunque me costaba la vida, lo hacía con cinco Nolotiles, pero me estaba ayudando, me daba fuerza", aseguró el referente histórico de la radio en España, quien decidió llevar la enfermedad con la mayor discreción posible. "Sí, no dije nada. Tampoco me parecía necesario decirlo".
Gabilondo contó con el apoyo incondicional de su mujer, Lola Carretero, en aquel momento tan complicado. "No queríamos que tampoco corriera el pánico en la emisora, entonces era muy notorio el poder de ese programa, y lo hizo, sí, lo hizo con muchísimo esfuerzo, con muchos calmantes, y bueno, yo creo que le ayudó a llevar la enfermedad”, explicó la pareja del periodista en el programa de Laura Siscar, rompiendo así su habitual discreción.
Gabilondo nunca ha tenido miedo al paso del tiempo y afrontó su diagnóstico con gran serenidad, quizás porque el mayor golpe de su vida lo recibió el 11 de julio de 1981. Aquel fatídico día, murió su primera esposa, Maite Egaña, madre de sus tres hijos, Iñaki, Urko y Ainhoa.
"La muerte de Maite, la larga agonía de Maite, porque Maite se murió después de estar más de ocho años muriéndose... Es un espanto de historia", lamentó en el ya desaparecido Palo y astilla, presentado por Mamen Mendizábal en laSexta. "Era una mujer dulce, preciosa, muy bonita, parecía una niña, era muy linda, estábamos muy enamorados y se puso muy enferma y estuvo muy enferma durante mucho tiempo hasta que se murió", pronunció muy afectado.
Dos años después de enviudar, Lola Carretero se cruzó en su camino, convirtiéndose en un auténtico ángel de la guarda. "Parece que no vas a encontrar nunca un amor como el primero, pero cuando surge el segundo te das cuenta de que sí. Son distintos, pero ambos son impresionantes", reflexionó el periodista.
"El segundo amor tiene una profundidad especial. Además, en mi caso, venía con un acompañamiento de peso. Yo tenía tres hijos y Lola era una chica soltera que tenía muchos novios alrededor. Que una chica se enamore de un señor y se lleve de premio tres chavales demuestra muchas cosas", dijo emocionado. Por último, aseguró que el mayor logro de su vida es que Lola y sus hijos "se adoren". "Que nos queramos todos mucho y que el recuerdo de Mayte siga ahí, respetado, perfumado, sin que nadie lo toque", señaló.










