Blanca Suárez dice sentirse "muy afortunada, en general", y lo cierto es que motivos no le faltan. Acaba de estrenar nueva película, Parecido a un asesinato, un thriller en el que "todos sus personajes esconden algo y huyen de un pasado" y en el que comparte cartel con Eduardo Noriega, Tamar Novas y Claudia Mora. Casi dos décadas después de su debut en el mundo de la interpretación, Blanca continúa siendo una de las actrices más aclamadas de la pequeña y la gran pantalla.
© Andrés García Luján¿Cómo definirías Parecido a un asesinato?
Es una película difícil de contar sin hacer spoilers, pero todos sus personajes esconden algo y huyen de un pasado. En el caso de mi personaje, Eva, sale de una relación con mucha toxicidad, mucha oscuridad y malos tratos, pero consigue reformular su vida. Intenta llenarla de luz, pero, como en todo buen thriller, el pasado siempre está llamando a la puerta.
En la película, tu interpretación es de estar sufriendo y tensa todo el tiempo.
Es verdad, es verdad. Además, la película se cuenta desde diferentes puntos de vista que se le aportan al espectador hasta conocer el desenlace, como si fuera de Jessica Fletcher.
© Andrés García LujánLlama la atención que hagas de madrastra siendo tan joven.
Al final, todos vamos creciendo y entrando en edades en los que evidentemente tus personajes empiezan a tener descendencia, como es lógico. Y todos los de mi generación ya estamos ahí.
Compartes pantalla con Eduardo Noriega, que es uno de los actores que más levantaban pasiones a finales de los noventas.
¿Te refieres a si era mi crush? No era el mío, pero no porque no me gustase, sino porque era muy pequeña. En ese momento, estaba con las Spice Girls, Punky Brewster… (ríe) Eduardo estaba más con el mundo Tesis y con El tormento. Pero, evidentemente, es una suerte tener la oportunidad de trabajar con referentes de la profesión.
Sigo sintiendo algo de incredulidad cuando me veo en el set de rodaje con alguien a quien admiro o de quien he seguido la carrera. Es como que, de repente, estoy compartiendo plano secuencias con esa persona. Es raro.
© Andrés García LujánTu personaje, por motivos justificados, es una mujer paranoica y obsesiva. ¿Consideras que tienes algo en común con ella?
No, no soy especialmente obsesiva. Realmente mis obsesiones son un poco más de día a día. En contraposición a la profesión que tengo, que es bastante inestable y con una agenda anárquica, intento sobre lo que tengo el poder de controlar y de poner orden. Si tuviera que decir algo, sería tener una agenda muy estructurada, un orden en la vida más o menos. Intentar que sea lo más estable posible dentro de mi inestabilidad.
Cumples 37 en un par de semanas, ¿qué es lo que vas aprendiendo y lo que notas que vas adquiriendo con el paso del tiempo?
Calma. Capacidad de relativizar las cosas y también una capacidad de observación mayor. A lo mejor hace años, había cosas que me podían quitar el sueño, pero ahora intentas colocar las cosas en su debido lugar y con la importancia que se merecen.
© Andrés García Luján
© Andrés García Luján¿Por ejemplo?
No estoy pensando en nada en concreto. Pero si es verdad que aunque cumplir años no es que me emocione especialmente, si cumplo es que estoy aquí y eso me parece una suerte.
Si llevas casi la mitad de tu vida trabajando como actriz. ¿Qué consejo le darías a la Blanca de tus inicios?
Creo que no le daría ningún consejo. Pienso que actuamos lo mejor que sabemos en ese momento con las herramientas que tenemos. Entonces me parece como muy injusto, casi 20 años después, darme la vuelta, mirar esa nena de 17-18 y decirle lo que tiene que hacer. Hay que actuar como tengas que actuar con la madurez que tienes a los 17. Evidentemente, considero que no cometí grandes errores. Profesionalmente, no creo que que interviniese demasiado.
Mucha gente está viendo ahora El internado con las plataformas. ¿Cómo lo vives?
Lo que más me sorprende es que, de repente, chicos y chicas pequeños o muy muy jovencitos hablen de ese personaje de El internado o de otros personajes de aquella época, cuando ni habían nacido.
© Andrés García Luján¿Nunca ves las series ni las películas que haces?
Vi El internado en su momento, pero no lo he vuelto a ver. No he revisitado ninguna serie mía ni ninguna película mía de años atrás.
¿Con quién guardas más relación de la gran cantera que salió de esa serie?
Fue una gran suerte para todos nosotros coincidir y formar ese grupo, haber compartido una de las primeras veces actuando con todos ellos. Hace poco, en el pasado Festival de San Sebastián vi a Elena Furiase y tuve la oportunidad de ponerme al día con ella.
Hace años se hablaba mucho de que fueras a Hollywood, incluso llegaste a rodar una película en Estados Unidos. ¿Es algo que ya no te preocupa o te interesa?
He ido gestionando las ofertas y las pruebas que surgen un poco como han ido viniendo, pero no ha aparecido nada con lo que quiera hacer la maleta y seguir mi camino en Hollywood.
© Andrés García Luján¿Pero sigues haciendo castings para fuera?
Sí, siguen pasando.
¿Cómo definirías el momento actual que estás viviendo?
Me siento muy afortunada, en general. Este mes estreno esta película y Respira 2. Me parece que me siguen pasando cosas muy increíbles.
