Benito es mucho Benito. Así es como se llama de verdad este hombre hecho a sí mismo, alguien que de la nada llegó a la cima y hoy es el rey del mambo si hablamos de música urbana. Con su estilo único e inconfundible, nadie atrae ni vende tanto como él en el universo reguetonero. Por eso, no es de extrañar que el mayor acontecimiento deportivo que se celebra cada año en Estados Unidos haya querido tenerlo en 2026. Sí, porque Bad Bunny promete poner el estadio patas arriba durante la Superbowl con un show de altos vuelos que seguro dará que hablar. Así anunciaba él mismo en sus redes sociales, con su tema Callaíta de fondo, lo que está por venir:
Será el próximo 8 de febrero en Santa Clara (California) cuando el artista puertorriqueño de 31 años salga a escena y deleite a sus fans, que se cuentan por millones alrededor del mundo, actuando en una cita cuya audiencia potencial es de más de 125 millones de telespectadores (solo en Norteamérica). El cantante boricua coge así el relevo de otras leyendas y nombres consagrados que tuvieron la oportunidad de brillar en el intermedio de la final de la NFL, caso de Michael Jackson, Madonna, U2, Bruce Springsteen, Prince, Beyoncé, Paul McCartney, Rihanna, Coldplay, Jennifer Lopez, Lady Gaga o Katy Perry.
Cierto es que el rapero ya actuó en la Superbowl de 2020 junto a Shakira, Jennifer Lopez y J Balvin, pero esta vez será muy diferente. Ahora, el intérprete de Me porto bonito será el amo y señor del show que veamos en el Levi's Stadium, lo que será una muestra más de su estatus como ídolo de masas. Fiel a sus raíces latinas, el también compositor no se ha olvidado de sus orígenes al hablar del hito que supone actuar en la Superbowl él solo, haciendo además un juego de palabras. “Lo que siento me supera. Es por quienes me precedieron y corrieron incontables yardas para que yo pudiera entrar y anotar un touchdown… esto es por mi gente, mi cultura y nuestra historia", ha dicho emocionado.
De trabajar en un supermercado al olimpo de las estrellas
El 'Conejo malo' lleva tiempo en la cresta de la ola y no hay quien le baje de ella. Está aún lejos de tocar techo y tiene múltiples facetas que nos descubren a un verdadero artista todoterreno. Causa sensación en (casi) todo lo que hace, como cuando lo vemos, por ejemplo, en la gala MET. Su pasión por la moda nunca deja indiferente a nadie, con impactantes y originales looks muy acordes a los gustos que siempre ha defendido.
En lo musical, que es donde arrasa, si por algo destaca es por las melodías que le han coronado como el más escuchado durante los últimos años en Spotify, según datos de la plataforma. En España dará hasta doce conciertos entre Madrid y Barcelona el próximo mayo y junio, lo que ha desatado la locura total entre sus seguidores. De hecho, conseguir ahora una entrada para verlo en nuestro país resulta misión imposible. Todo quedó vendido a los pocos minutos de ponerse a la venta.
Por si esto fuera poco, Bad Bunny también es actor, y no se le da nada mal eso de meterse en la piel de otros personajes, como cuando intentaba "cargarse' a Brad Pitt en la trepidante Bullet Train (2022). Al echar la vista atrás para saber cómo empezó el fenómeno global en torno a su figura, hay que empezar por el principio. Nació el 10 de marzo de 1994 en el municipio de Vega Baja , siendo hijo de un transportista y una profesora de inglés.
Ganó popularidad siendo un veinteañero a través de internet, donde mostraba sus canciones, lo que le llevó a firmar su primer contrato discográfico en 2016. Todo eso mientras trabajaba como empaquetador en un supermercado para ganarse un dinero y estudiaba en la Universidad. Tras el éxito de su sencillo Soy peor, colaboró con artistas de la talla de Cardi B o Drake, lo que terminó por catapultarle al estrellato. De ahí, su primer álbum de estudio ganó el Grammy Latino, lo que le hacía ya imparable en un continuo suma y sigue.
Amigo de nuestras 'celebrities' más internacionales como son Penélope Cruz y Javier Bardem, a los que vimos disfrutar de uno de sus últimos conciertos, Benito Antonio Martínez Ocasio también ha sido protagonista de la crónica social por su sonado romance con la modelo Kendall Jenner (de la familia de las Kardashian) en 2023. De la misma manera, mantuvo una relación con la diseñadora de joyas Gabriela Berlingeri y antes con la influencer Carliz de la Cruz, de 2011 a 2017.