El 18 de agosto se cumplió un año de la muerte de Alain Delon y la guerra entre sus hijos está más viva que nunca. El tiempo no ha servido para calmar los ánimos, sino todo lo contrario, ya que el menor Alain-Fabien ha solicitado formalmente la anulación del testamento. Además, se plantea demandar a sus hermanos, Anthony y Anouchka, así como a las tres personas encargadas de hacer cumplir las últimas voluntades del galán francés, entre ellas su abogado de confianza, Christopher Ayella.
Según la prensa gala, el Palacio de Justicia de París ha confirmado el hijo menor de Delon ha abierto un procedimiento civil para tramitar la petición. Según Florence Watrin, abogada de Alain-Fabien, en el momento en que el actor modificó su testamento en 2022 "no tenía suficiente capacidad de discernir". Su hijo considera que perdió sus facultades mentales en 2019, a raíz de sufrir un accidente cerebrovascular, por lo que el cambio en el documento, a su juicio, carece de validez.
El protagonista de El Gatopardo, A pleno sol y Rocco y sus hermanos, con una fortuna estimada en más de 50 millones de euros, hizo un testamento en 2015 que mantuvo en la caja fuerte de un banco. Lo que nadie sabía es que fue modificado por el propio actor el 24 de noviembre de 2022 en el despacho de su notario suizo. Ese día estaba acompañado de dos personas: el que entonces era su abogado, Christophe Ayela, y su hija mediana, Anouchka, por la que siempre confesó sentir predilección. "Si hubiera podido darle todo a Anouchka, lo habría hecho", decían sus íntimos. En el nuevo documento dispuso que "todos los bienes compartidos entre los hijos vayan en un 50% a Anouchka, un 25% a Anthony y un 25% a Alain-Fabien".
La ley francesa no contempla desheredar a los hijos, pero sí permite beneficiar a uno con la herencia, como ha ocurrido. Anouchka se convirtió en heredera de la inmensa parte del legado de la estrella del cine. Desde entonces, es ella quien tiene la última palabra en todo lo relacionado con el nombre, la imagen y el legado profesional de Delon ya que un año antes de morir la designó beneficiaria de la sociedad que controla sus derechos de imagen. A este respecto, Watrin también ha solicitado que se anule esta donación realizada mientras estaba ingresado en la clínica Genoliers de Ginebra (Suiza) y de la que sus otros hijos no tuvieron conocimiento hasta después de su muerte.
Además, Anouchka heredó un apartamento en Ginebra de casi 300 metros cuadrados, con una gran terraza y piscina cubierta. Pertenece al exclusivo barrio de Florissant-Champel, posee vistas al centro de la ciudad y está valorado en tres millones de euros. En esta casa lleva instalada desde 2018 junto a su marido, Julien Dereims. La también actriz poseía el 51% de las acciones de la empresa de Delon, en la que después pasó a ser vicepresidenta del consejo directivo. Por lo tanto, ahora tendrá el total de las acciones.
La amplia colección de arte que tenía la estrella del celuloide no forma parte de ningún lote porque vendió en una subasta 80 piezas de su colección, en la que había pinturas y dibujos del Renacimiento italiano, por más de 8 millones de euros. Entre las obras vendidas se encontraban tesoros de pintores como Delacroix, Matisse, Millet o Edgar Degas. Con este movimiento, Delon quería era evitar es que hubiera un conflicto familiar, porque tenía miedo de que se repitiera la situación que se vivió tras la muerte de su gran amigo de su amigo Johnny Hallyday. Está claro que no fue suficiente.