2025 ha sido un año para no olvidar en la casa de Ana Boyer y Fernando Verdasco. En febrero, el ganador de tres Copas Davies colgaba la raqueta —de manera profesional— tras más de dos décadas dedicadas al tenis. Unos meses después, en junio, el matrimonio celebraba el bautizo de su tercer hijo, Martín —que cumplió un año en abril—. Tras una intensa mitad de año, Ana y Fernando se han decantado por la idílica costa gaditana para sus vacaciones de verano en familia, aunque no todo es descanso y Miguel y Mateo, sus hijos mayores —de seis y cuatro años, respectivamente—, se han propuesto alcanzar el nivel de su padre en las pistas.
El que llegó a posicionarse como número 7 del mundo en el ranking ATP no ha perdido la oportunidad de volear con sus hijos durante su escapada en Sotogrande (Cádiz). En el camino de ida a la pista de un club de la zona, Miguel y Mateo iban deleitándose con un rico helado que, sin duda, agradecieron debido a las altas temperaturas, al mismo tiempo que cargaban con los botes de pelotas para disfrutar de un entretenido rato con su padre.
Fernando, por su parte, era el encargado de las raquetas —las de los pequeños, acorde a su edad, lo que demuestra que no es la primera vez que juegan juntos— y les guiaba hacia su cancha caminando unos pasos por delante.
Mientras que los mayores se entretenían intentando derrocar a su padre en el deporte que le ha otorgado siete títulos ATP individuales —y ocho en dobles—, Ana disfrutaba de unos instantes de paz en su destino favorito para el descanso estival.
Muy deportistas
El deporte y el bienestar físico es un pilar importante en la familia Verdasco-Boyer. Además del tenis, al que son todos muy aficionados —Ana siempre que podía iba a animar a Fernando—, entrenan juntos en su gimnasio y, con sus amigos de Doha —donde fijaron su residencia en 2016—, juegan al pádel de vez en cuando.
Tal y como nos confesaba Ana en una reciente entrevista, Mateo y Miguel disfrutan mucho de hacer planes con su padre. Estos, generalmente, están relacionados con el deporte, da igual "jugar al fútbol, al tenis, nadar...". Además, la hija de Isabel Preysler nos confesaba que a ambos les encanta estar moviéndose todo el rato.
"Miguel es pura energía y alegría. Está todo el día sonriendo y no se está quieto ni un minuto del día. Me encanta ver lo disfrutón que es en todo lo que hace y cómo le gusta apuntarse a cualquier plan", nos comentaba divertida, Mateo, por su parte, "es algo más tranquilo, pero también más travieso, y tiene unas ocurrencias que me hacen reír sin parar. Además es muy muy cariñoso".
Una emotiva despedida
Fue el día de San Valentín, el 14 de febrero, cuando Fernando anunciaba que jugaría sus últimos sets junto a "mi amigo Novak Djokovic, una verdadera leyenda de nuestro deporte y uno de los mejores atletas de todos los tiempos" en el Qatar ExxonMobil Open 2025, agradeciendo a quienes habían seguido su carrera desde los inicios.
Unos días más tarde, cuando finalizó el torneo, el tenista fue homenajeado en Doha por su excelente y admirable trayectoria en las pistas. La despedida, donde fue arropado en todo momento por Ana y sus hijos, contó con emotivos mensajes de compañeros, como el de Rafa Nadal.