Alessandro Lequio ha vuelto a acaparar titulares. A sus 65 años, el colaborador televisivo ha generado conversación con unas imágenes captadas durante sus vacaciones en Galicia, donde se le ha visto en traje de baño mostrando una forma física envidiable. Sin embargo, él ha querido dejar muy claro que no se trata de una cuestión estética, sino de una decisión profundamente personal. “A mi edad, estar en forma no es una cuestión de vanidad, es una cuestión de salud, de respeto por uno mismo. No se trata de lucir un cuerpo perfecto, sino de tener un cuerpo que me permita seguir viviendo con energía, dignidad y alegría”, ha declarado con total claridad.
Con estas palabras, Lequio pone en valor el ejercicio físico como un pilar fundamental en su día a día. No busca halagos ni titulares, sino coherencia y bienestar. En una reflexión sincera y transparente, añadía: “Cuidarse no es un capricho, es una forma de agradecerle al cuerpo todo lo que ha hecho por nosotros… Y prepararlo para lo que todavía queda por vivir”.
El colaborador de televisión, que desde hace años forma parte del elenco de programas como Vamos a ver, compartió estas reflexiones tras conocerse las imágenes veraniegas en las que aparece en bañador durante sus días de descanso. En ellas se le ve disfrutando del mar junto a su hija pequeña, Ginevra Ena, fruto de su matrimonio con María Palacios, y con quien pasa buena parte de su tiempo estival en tierras gallegas. Cuando en el plató se insinuó que aquellas fotos podrían haber sido pactadas, Lequio no dudó en responder con ironía pero también con contundencia: “No, Carmen. No es un posado pactado, alguien debería una disculpa como mínimo”.
Sus compañeros no tardaron en bromear con el asunto. “Está para mojar pan, pero lo de los oblicuos lo tengo que ver yo en el mes de septiembre, si no lo veo no me lo creo”, decía Carmen Borrego entre risas. Y, en tono más serio, Adriana Dorronsoro zanjaba el debate: “Lequio tiene esos oblicuos todo el año”. Esa afirmación no sorprende, teniendo en cuenta el estilo de vida que lleva.
Según contaba Pepe del Real en plató, el italiano sigue una rutina marcada por la disciplina: “Sigue una dieta estricta, madruga para hacer ejercicio y hace ayuno”, aseguraba.
Una rutina que, sin duda, da sus frutos. Ya en anteriores ocasiones, Lequio ha dejado claro que su compromiso con el deporte viene de lejos. En su juventud, fue campeón de Europa de kárate, y a día de hoy sigue manteniendo una forma física que pocos esperaban a su edad.
Durante una aparición anterior en el programa La vida sin filtros, llegó a hacer 50 flexiones en menos de 30 segundos, con americana puesta y el torso desnudo, como prueba de que no hay trampa ni cartón. Y, como él mismo ha explicado, esa energía viene de un lugar muy claro: de su deseo de vivir bien y de cuidarse para lo que queda por delante.