El polvorín en el que se ha convertido Oriente Medio tiene consecuencias impredecibles a todos los niveles, algo que lógicamente se traduce en una gran preocupación y desasosiego para los que allí residen. La escalada del conflicto bélico no parece tener fin y cada vez tiene más actores implicados, hecho que afecta de manera irremediable a un mayor número de países en la región. Entre esas naciones está Catar, donde vive Ana Boyer con su marido y sus hijos desde 2016, lugar que este lunes sufría un bombardeo sobre infraestructuras que tiene allí el ejército norteamericano.
Por suerte, esta pesadilla ha pillado a la hija de Isabel Preysler y su familia durante sus vacaciones en Ibiza, a más de 7.000 kilómetros de su domicilio en Doha. Es precisamente a las afueras de esta ciudad donde se encuentra la base aérea militar de Al Udeid, la que ha sufrido el ataque por parte de la Guardia Revolucionaria iraní en represalia por los misiles que las Fuerzas Armadas estadounidenses lanzaron el día anterior sobre tres de sus instalaciones nucleares. Un escenario de máxima tensión que la hermana de Tamara Falcó prefiere por ahora tomarse con cierta calma, siendo plenamente consciente de que la situación por aquellos lares es bastante complicada.
A partir de aquí, surge la pregunta de si tanto Ana Boyer (36 años) como su esposo, el laureado extenista Fernando Verdasco (41), se han planteado algún tipo de medida de urgencia en lo que atañe a su futura vuelta a casa. ¡HOLA! ha podido hablar con ella, quien nos cuenta cuál es la previsión que ambos tienen a día de hoy. "Nosotros vamos a volver a Catar a finales de agosto para el comienzo del cole de los niños", explica desde la isla balear. Es decir, que en un principio no tienen pensado regresar a su hogar hasta que no acabe el periodo estival que disfrutan en España.
De esta forma, si nada se tuerce más de lo que lo está ya y esta guerra de alcance internacional no va in crescendo, los cinco estarán de nuevo en Doha de cara al inicio del curso escolar de sus pequeños Miguel (6 años) y Mateo (4), ya que Martín (1) todavía es un bebé. "No cambian nuestros planes de momento", apostilla al respecto la que es licenciada en Derecho y embajadora de distintas marcas. En cualquier caso, el matrimonio sabe que la inestabilidad de la zona es un hecho y, por ello, no es descartable que tomen otra decisión diferente según se desarrollen los acontecimientos.
Lo que en estos instantes resulta imposible para ellos -como para el resto- es viajar directamente en avión a la capital catarí, ya que se ha cerrado temporalmente su espacio aéreo para protegerse de unos ataques que, por ahora, han podido ser interceptados. Así, compañías como Iberia, Air Europa o Vueling suspendían sus trayectos a este y otros destinos como Israel -otro de los contendientes principales del conflicto- o Emiratos Árabes Unidos. Son vuelos que, en el caso del país del Golfo Pérsico donde residen la exconcursante de Bake Off y su familia, están siendo desviados a aeropuertos cercanos como parte del protocolo de seguridad.
Otro de los compatriotas que vive en Doha junto a sus seres queridos es el futbolista Joselu Mato (35 años), desde que en el verano de 2024 fichara por Al-Gharafa Sports Club procedente del Real Madrid. El cuñado de Dani Carvajal se mudó allí con su mujer, Melanie Cañizares y sus dos hijos, Leo y Lucas. De hecho, esta última ha forjado una bonita amistad con Ana Boyer y más de una vez las hemos visto juntas, compartiendo planes ellas solas por Catar o con sus maridos, en fechas señaladas como algunos cumpleaños y acudiendo a importantes eventos deportivos.