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El Torneo de Queen's Club, antesala del Campeonato de Wimbledon, acoge este martes una de las citas más esperadas: el partido que enfrenta en primera ronda a los españoles Carlos Alcaraz y Alejandro Davidovich Fokina. Todas las miradas están puestas en este último, ya que es su primer plan tras casarse el 14 de junio con Paloma Amatiste. Un romántico enlace que celebraron en Andalucía, donde reunieron a familiares y amigos en un fin de semana de ensueño.
© aledavidovichofficial
© aledavidovichofficialLa pareja, que se comprometió en 2024 en la Fontana de Trevi de Roma, inició las celebraciones el viernes con una fiesta en la víspera de su boda. Como la inmensa parte de sus familiares y amigos estaban en Marbella la noche del viernes, los citaron en Chambao, un impresionante beach club con vistas privilegiadas al mar, su propia piscina y una completa oferta gastronómica. No faltaron la música en directo, las sorpresas y la lógica inquietud por todo lo que aún estaba por llegar, que ya prometía ser inolvidable. "Un último día como prometidos. Agradecido por el amor, las risas, la familia y los amigos que han estado con nosotros en cada paso del camino. Mañana, para siempre comienza", decía el tenista.
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© aledavidovichofficialEl sábado, día en el que comenzaron un nuevo capítulo ya como marido y mujer, se trasladaron hasta Cádiz para pronunciar el "sí, quiero". Como escenario eligieron Trocadero Sotogrande, un restaurante beach club decorado por Lorenzo Queipo de Llano. El enlace fue de principio al aire libre, con el mar como un imponente lienzo azul que sirvió de telón de fondo. Uno de los momentos más emotivos fue la entrada de la novia, del brazo de su padrino y sonando Por ti volaré, de Andrea Bocelli. Según caminaba al altar, enmarcado bajo un arco de flores, se desveló el secreto mejor guardado: su vestido.
© palomaamatistPaloma, que trabaja como jefa de desarrollo de producto en el sector de la moda y la belleza, apostó por una pieza con guiño romántico, de encaje blanco, cuerpo encorsetado y escote palabra de honor, mangas coordinadas que permiten dejar al descubierto los hombros y una preciosa falda con cola. Además, llevaba un velo que acompañaba el elegante movimiento de su look en cada paso que daba. Lo combinó con un sencillo y delicado ramo blanco. Las flores estaban muy presentes en toda la decoración, tanto en los bancos desde los que los invitados presenciaron la ceremonia como en las mesas, en cada rincón del jardín y en la mesa de bienvenida, con un espejo en el que ponía: "Bienvenido a la boda de Paloma y Alejandro. Donde sea, pero juntos".
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© aledavidovichofficialConvertidos en marido y mujer, Alejandro y Paloma fueron sorprendidos por una lluvia de pétalos blancos mientras se escuchaba Felicidad, canción de Al Bano y Romina que se entremezclaba con aplausos y gritos de ¡Vivan los novios! Ahí comenzó un cóctel y la cena. Las mesas se dispusieron alrededor de la piscina, creando de esta forma un ambiente único y muy relajante, de absoluta calma. Cuando fue cayendo el sol, se encendieron los candelabros mientras cenaban. Por supuesto, no faltó la tarta nupcial, de dos pisos y también adornada con flores, y una curiosa torre de copas que los novios llenaron para brindar con todos sus invitados. Los fuegos artificiales marcaron el broche de oro.
© aledavidovichofficialLa preparación para el torneo que los une esta semana ha impedido a Carlos Alcaraz estar presente en la boda, a la que estaba invitado. De hecho, mientras que el sábado todo estaba listo para el "sí, quiero", el reciente ganador de Roland Garros cogía un vuelo con destino Londres para comenzar los entrenamientos y dar una vez más su mejor versión en la hierba del Queen's Club. "Me invitó a su boda. Es un amigo. Nos conocemos desde hace mucho tiempo, Alejandro también jugaba con mi hermano mayor cuando eran pequeños. Así que le conozco bastante bien, y jugué contra él varias veces. Nunca es fácil jugar contra un amigo", contaba tiempo atrás.
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© aledavidovichofficial
© aledavidovichofficialEncontró el amor gracias al tenis
Alejandro Davidovich, que ocupa el puesto 28 en el ránking ATP y forma parte del grupo de la Copa Davis, nació en junio de 1999 en Málaga, ciudad en la que tiempo antes se habían instalado sus padres: Eduard Mark, boxeador sueco con nacionalidad rusa, y Tatiana, que es también rusa. Se separaron cuando era un niño y le inculcaron la afición al tenis, deporte por el que conoció a la que hoy es su mujer. Y es que Gianmarco Amatiste, hermano de Paloma era sparring, es decir, una persona que ayuda a los jugadores a prepararse antes y durante los torneos.
