Dos años después de haber sido diagnosticado con demencia frontotemporal, Bruce Willis continúa con su rutina diaria, basada en el bienestar dentro de su hogar y la compañía de sus seres queridos. El entorno familiar tiene una influencia determinante en la calidad de vida del actor y así lo ha dado a conocer su hija mayor Rumer, quien le hizo el mayor regalo que podría haber deseado: ser abuelo.
'Se le ilumina la cara'
La hija de Demi Moore ha compartido un tierno detalle de cómo es la relación de Bruce Willis con su nieta Louetta. La actriz de 36 años contó lo volcada que está toda la familia con la pequeña Louetta, la pequeña de dos años que Rumer tuvo junto a su expareja, Derek Richard Thomas. La niña se ha convertido en un verdadero rayo de luz para Bruce, quien actualmente enfrenta una batalla contra la demencia. "Incluso con mi padre, a pesar de los retos a los que se enfrenta, cada vez que vamos a visitarlo, se le ilumina la cara, se emociona mucho y es muy cariñoso con ella", señala en una entrevista con la revista People. "Mi familia es increíble con ella. Me siento muy afortunada, y ella también lo es. Están obsesionados con ella".
También habló de la gran felicidad que le ha aportado a Demi Moore la llegada de este bebé. "Se quieren mucho. Deberías ver cómo se le ilumina la cara cuando hablan por FaceTime cuando estamos fuera", dijo sobre Louetta y su madre. "Se emociona mucho y es muy tierno, y mi madre es increíble con los bebés. Siempre lo ha sido, así que es una delicia verlas juntas", añade orgullosa de la gran familia que tiene.
La protagonista de La sustancia también se han convertido en un pilar fundamental para Bruce Willis desde que supo su enfermedad. Le acompaña, le ofrece el apoyo y cariño que necesita, y da consejos a sus tres hijas sobre cómo sobrellevar la situación. A Rumer, Scout y Tallulah les aconsejó que no se aferraran al pasado, sino que valoren lo que tienen hoy: "Cuando dejas de lado quiénes han sido, quiénes crees que deberían ser o quiénes te gustaría que fueran, puedes vivir el presente y disfrutar de la alegría y el amor que hay en ellos. Compartiré lo que le digo a mis hijas, que es importante encontrarlos dónde están y no aferrarse a lo que no es, sino a lo que es".
Según los expertos, el ambiente familiar juega un papel clave en la calidad de vida de las personas con enfermedades neurodegenerativas. Cuando la familia está unida, se apoya y se mantiene activa, no solo ayuda a que el paciente se sienta mejor emocionalmente, sino que también alivia el estrés y la ansiedad de quienes lo cuidan. En el caso de Bruce Willis, su familia se ha volcado por completo en cuidarlo. Han cambiado sus rutinas para poder estar con él, darle seguridad y mucho cariño. Además, aprovechan cada momento juntos para crear recuerdos bonitos y mantener un ambiente alegre. Todo esto les ayuda a sobrellevar mejor la situación y que todos, incluido Bruce, se adapten emocionalmente a los altibajos y desafíos que van surgiendo con la enfermedad.