Ana de Armas ha demostrado que los sueños no entienden de fronteras. A los 18 años, dejó Cuba con apenas 200 euros y aterrizó en Madrid con la ilusión de ser actriz. Un mes después, ya brillaba en la televisión española gracias a su papel en El Internado, una serie que marcó a toda una generación y la lanzó al estrellato. Pese al éxito alcanzado, decidió arriesgarlo todo y empezar de cero en Los Ángeles. No hablaba inglés, pero eso no se convirtió en ningún obstáculo: aprendió el idioma en tiempo récord y pronto empezó a sumar papeles cada vez más importantes. Actuó junto a Keanu Reeves, Ryan Gosling o Daniel Craig, y poco a poco fue consolidando su lugar en la industria.
Su relación con Ben Affleck durante la pandemia la convirtió en un fenómeno mundial, pero también en el objetivo recurrente de los paparazzi. Agobiada por la presión mediática, se mudó a Nueva York, donde vivió un romance con Paul Boukadakis, vicepresidente de Tinder. Su gran consagración en el cine llegó con Blonde, el biopic de Marilyn Monroe que le valió su primera nominación al Oscar, convirtiéndose en la primera actriz cubana en lograrlo. Aunque no ganó la estatuilla, sí alcanzó un estatus privilegiado en Hollywood y se ganó el cariño y el respeto del público como una las estrellas más queridas de la industria.
Después de un tiempo apartada del foco mediático, regresa con más fuerza que nunca. Una de las grandes apuestas de su carrera es Ballerina, el spin-off femenino de la saga John Wick, donde se mete en la piel de una asesina profesional en busca de venganza. La película, que combina acción trepidante y grandes dosis de emoción, supone un nuevo reto físico e interpretativo para la actriz que consolida ese perfil de heroína de acción. Aunque el estreno estaba previsto para 2024, el proyecto se retrasó debido a la huelga de guionistas de Hollywood y uno de los estrenos se celebró anoche en Londres.
De todos los momentos vividos hay uno reciente que acaparó la atención mundial: su relación con Tom Cruise. Unas fotografías publicadas en ¡HOLA! en una cena el Día de San Valentín en Londres avivaron los rumores acerca de una posible relación. A esto le siguieron otras citas que hicieron soñar a sus fans, viéndoles descender de un helicóptero privado junto a los perros de la actriz, 'Elvis' y 'Salsa', y en el 50º cumpleaños de David Beckham en Londres. Los medios internacionales dieron por hecho que se habían convertido en pareja, pero lo cierto es que ninguno de los dos ha confirmado ni desmentido su relación.
La admiración entre ambos es mutua y por lo pronto se han convertido en una de las parejas más perseguidas del cine. El protagonista de Top Gun ha elogiado públicamente el talento y la disciplina de la estrella de Ballerina. "Su habilidad es increíble. Es una actriz que tiene dotes dramáticas, cómicas...Tiene mucho talento", señaló para Access Hollywood en el estreno de la última película de Misión Imposible. Por su parte, Ana de Armas ha destacado la generosidad del actor y su capacidad de liderazgo. "Estamos trabajando en muchísimas cosas. No solo en uno, sino en varios proyectos con Doug Liman, Christopher McQuarrie y, por supuesto, Tom", respondió a su paso por Good Morning America, donde confesó estar "muy emocionada" ante estos desafíos.
Con una agenda repleta de nuevos retos profesionales, una conexión que traspasa la pantalla y el respaldo de algunos de los cineastas más influyentes de Hollywood, Ana de Armas y Tom Cruise formarán una de las alianzas más fascinantes del cine. Su química y complicidad despiertan una enorme expectación dentro y fuera de los sets. Habrá que esperar para ver qué nos depara esta prometedora unión, pero todo indica que su historia no ha hecho más que comenzar.