Lindsay Lohan ha retomado su carrera. Después de confirmar su regreso triunfal en Navidad con Nuestro secretito en Netflix, quiere demostrar que no ha sido un éxito pasajero y que ha vuelto para quedarse. Ahora, está lista para su siguiente gran paso: Count My Lies (Cuenta mis mentiras), la serie de Hulu que marca su regreso al drama y su estreno como protagonista de una serie. La artista, que conquistaba a toda una generación con Chicas malas o Tú a Londres y yo a California, convirtiéndose en un ídolo adolescente a principios de los 2000, no solo liderará la historia, sino que también será productora ejecutiva, dejando claro que vuelve con más fuerza que nunca.
A falta de recibir luz verde por parte del canal, esta nueva producción, que adaptará la novela debut homónima de Sophie Stava, publicada el pasado mes de marzo, además del regreso de la protagonista de Quiero ser superfamosa, de 38 años, cuenta con otro atractivo añadido, estará escrita y producida por Isaac Aptaker y Elizabeth Berger, conocidos por su trabajo en This Is Us y Cómo conocí a tu padre. En esta historia, Lindsay se pone en la piel de una adinerada madre de familia, un papel que supone un giro en su carrera, alejándola de la comedia para explorar un personaje con muchas capas. Un registro totalmente opuesto al que nos tiene acostumbrados y con el que, seguro, consigue sorprender al público.
La trama arranca cuando Sloane Caraway, una mentirosa compulsiva, utiliza sus engaños para conseguir un trabajo como niñera para la guapísima y carismática Violet (Lohan) y su marido, Jay Lockhart, una familia aparentemente perfecta. Todo parece ir sobre ruedas y la chica siente que, por fin, ha conseguido el trabajo de sus sueños, pero lo que la joven no sabe es que acaba de entrar en una casa llena de secretos que están a punto de estallar, con consecuencias potencialmente catastróficas para todos.
Si finalmente recibe el visto bueno por parte de Hulu, como todo parece indicar, Count My Lies se sumaría a otros proyectos recientes con los que Lohan confirma su renacer artístico. Tras una década alejada de las pantallas, la actriz retomaba su carrera en 2022 con Golpe de Navidad para Netflix. Poco después, en 2024, protagonizaba dos comedias románticas más para el gigante de streaming, Un deseo irlandés y Nuestro Secretito, además de hacer un cameo en el musical Chicas malas, después de haber protagonizado la película original en 2004.
Lindsay ha decidido resurgir a lo grande y, el próximo 8 de agosto, llegará a los cines con Ponte en mi lugar 2, secuela de la película que protagonizó junto a Jamie Lee Curtis en 2003, en pleno apogeo de su carrera como estrella Disney. La trama giraba en torno a una madre y su hija completamente distintas que, tras varios conflictos, intercambiaban sus cuerpos por culpa de una galleta de la fortuna. Ambas debían adaptarse a la vida de la otra mientras buscaban una forma de volver a la normalidad y, en el proceso, aprendían a entenderse.
Las dos actrices retoman sus recordados papeles en esta nueva entrega que sigue a la hija adolescente de Anna (Lohan) y a la de su novio, de edad similar. Las dos chicas intercambiarán sus cuerpos con las protagonistas originales. De este modo, la cinta apuesta por un giro multigeneracional que retoma la historia años después de que Tess (Curtis) y Anna atravesaran una crisis de identidad. Ahora, el personaje de Lindsay es madre y también futura madrastra. Mientras enfrentan los innumerables desafíos que surgen cuando dos familias se fusionan, las dos descubren que, en efecto, un rayo puede caer dos veces en el mismo sitio.
Con nuevos proyectos en marcha, Lindsay Lohan se enfrenta a una nueva etapa en su carrera en la que está dispuesta a brillar y a recuperar un destacado lugar en la industria, demostrando que todavía tiene mucho que ofrecer al público.