Hay escenas que marcan y emociones que se graban en la memoria de los espectadores para siempre. Precisamente, una de ellas tenía lugar hace solo unos días en el segundo capítulo de la segunda temporada de The Last of Us. Para quienes aún no hayan visto el episodio, avisamos de que este texto contiene spoilers, ya que vamos a hablar de uno de los instantes más sobrecogedores que hemos vivido en la ficción: la muerte de Joel Miller, el personaje interpretado por Pedro Pascal. Un giro en la trama que ha sido tan impactante para el público como para los protagonistas y responsables de la exitosa serie de Max, quienes han contado cómo vivieron ese momento tan desgarrador.
Para quienes no estén familiarizados con la serie o el videojuego en el que se basa, es importante destacar que Joel es uno de los personajes más complejos e importantes de la historia. En la primera temporada, su figura es esencial. Se trata de un hombre endurecido por los horrores de un mundo postapocalíptico que pierde a su hija Sarah (Nico Parker) en los primeros días de la pandemia que acaba con la civilización tal como la conocemos.
Esta tragedia marca su vida para siempre, transformándolo en alguien más sombrío y desconfiado. A lo largo de la trama Miller desarrolla una relación casi paternal con Ellie (Bella Ramsey), la joven cuya supervivencia parece ser clave para salvar a la humanidad. La conexión entre ambos se convierte en el eje emocional de la narrativa y en un vínculo que conmueve profundamente a los espectadores. Por eso, su repentina y violenta muerte ha supuesto un antes y un después no solo en la ficción, sino también para quienes han estado implicados en ella desde dentro, tal y como han desvelado los protagonistas.
“Creo que fue algo muy discreto, palabras aterradoras que nadie quiere pronunciar”, confesaba Ramsey a Entertainment Weekly con respecto a cómo se prepararon para esa toma y dejando constancia de la magnitud que esa escena clave tenía para ellos, añadiendo que era "algo demasiado grave como para hablar de ello sin más". Para el equipo, el momento era tan decisivo que durante meses se refirieron a él de forma ambigua denominándolo como el evento, el momento Joel y Abby o, simplemente, la escena. Evitaban pronunciar lo que realmente iba a suceder, como si decirlo en voz alta lo hiciera más real y al no hacerlo fuera evitable.
Pascal, que asumió el papel de Joel sabiendo desde el principio cuál sería su destino, vivió su desenlace con una mezcla de aceptación y entrega. “No es que me dijeran ‘te matamos al principio de la segunda temporada’. Pero siempre fue un entendimiento claro que íbamos a ser fieles al material original”, explicaba el actor, que reconoce que siempre tuvo claro que su viaje en la serie estaría marcado por una fecha de caducidad y que "solo era cuestión de cuándo y dónde".
El rodaje de la secuencia que cambiaría el rumbo de la historia se llevó a cabo en Kamloops, Canadá, bajo condiciones climáticas extremas. Se grabó durante dos días, a comienzos de marzo, en plena nieve y con temperaturas gélidas, lo que intensificó aún más la dureza emocional de lo que allí se representaba: Joel, presa de una emboscada, es brutalmente golpeado con un palo de golf por Abby (Kaitlyn Dever) hasta que muere ante los ojos de Ellie, quien contempla el momento horrorizada sin poder hacer nada para ayudarlo. Pascal recuerda que la energía fue normal ese día hasta que apareció en el set con el maquillaje, visiblemente herido, lleno de sangre y con el ojo morado. Cuando le vieron, sintió un silencio absoluto a su alrededor: “Realmente pude ver cómo este tipo de dolor se apoderaba de la mirada de todos”.
Pese a conocer cuál sería su destino desde incluso antes de comenzar la serie, el protagonista de Juego de tronos también ha compartido lo difícil que fue grabar su adiós y que ahora se encuentra en una “fase de negación”. “Me doy cuenta de esto cada vez más a medida que envejezco. Me encuentro cayendo en la negación de que todo haya terminado. Sé que estoy conectado para siempre con muchas personas de la experiencia y simplemente tengo que verlos en otras circunstancias, pero nunca más lo haré interpretando a Joel en The Last of Us. Y no, no pienso mucho en ello porque me entristece”, aseguraba, recalcando la importancia que ha tenido para él este personaje y el intenso vínculo que ha formado con el equipo.
Por su parte, Bella, también ha compartido el peso emocional que le ha dejado la muerte de su compañero de aventuras en la ficción, calificándola como “devastadora”. La actriz ha asegurado que a pesar de que saber que iba a pasar antes o después, "al leerlo en el guion me daba miedo que llegara ese momento...y lloré. De hecho, lloré desconsoladamente. Es la primera vez que lloro leyendo un texto”, confesaba a Variety.
La escena también fue vivida con gran intensidad por parte del director del episodio y fanático confeso de la historia, Mark Mylod. El realizador ha trabajado en series como Succession o Juego de Tronos, por lo que no es ajeno a los rodajes con muertes impactantes... sin embargo, esta le tocó de manera especial. “Kaitlyn Dever y Bella Ramsey tuvieron que mostrarse muy vulnerables durante varios días para encontrar una resistencia mental y física extraordinaria para llegar al límite y no dejar nada por hacer emocionalmente. Siempre hay una toma que lo logra. Creamos varias tomas con Bella, solo ella y yo, sintiendo que podía llegar más allá. Luego hubo una en la que no pude mediar palabra, solo sentí las lágrimas cayendo por mi cara. Entonces supe, como director, que esa era la indicada”, desvelaba a Variety.
Para Dever, cuyo personaje es el responsable de la muerte de Joel para culminar una venganza, el rodaje coincidió con un momento muy personal y doloroso. “Perdí a mi madre dos o tres semanas antes de rodar esta escena”, explicaba, revelando que el funeral había sido apenas tres días antes de su primer día en el set, que justo coincidía con la escena más crucial, no solo del capítulo, sino de toda la serie. “Estaba en una especie de niebla”, confesaba a Entertainment Weekly. En lugar de posponer las grabaciones, el equipo reestructuró el calendario a su alrededor. “Le dijimos: ‘Tómate el tiempo que necesites’”, contaba Craig Mazin, cocreador de la serie, quien además aseguraba que “me importa muchísimo el show, pero es solo televisión. No voy a interrumpir el proceso de duelo de alguien por la muerte de su madre”.
Dever apenas recuerda qué comió esos días. Incapaz de seguir su rutina habitual como actriz, optó por una interpretación más espontánea. “No pude preparar el texto con semanas de antelación como suelo hacer. Tenía un enfoque diferente y creo que le sirvió mucho al personaje. Pude, en cierto modo, simplemente dejarme llevar y no pensar demasiado en ello, porque las palabras escritas en el guion son muy poderosas", recordaba.
La escena fue filmada en un set cerrado, con un equipo mínimo y bajo la dirección de Mylod. En lugar de centrarse en la violencia explícita, el director y la directora de fotografía, Catherine Goldschmidt, eligieron enfocar los rostros de los personajes que presenciaban la muerte. Uno de esos momentos, según Craig Mazin, cocreador de la serie, surgió de manera completamente espontánea: la actriz Ariela Barer, Mel en la ficción, comenzó a llorar durante una toma sin que nadie se lo indicara. “Fue algo que sintió”, explicaba el showrunner, remarcando que el impacto emocional de esa instante era lo más importante.
Mazin reconoce además a Entertainment Weekly que "lo más difícil fue ver a Bella viendo cómo sucedía". "Pedro y Bella están extraordinariamente unidos. Trabajaban en estrecha colaboración, se querían mucho. Si pretendes estar en ese momento, probablemente sea algo sencillo, pero esto no es fingir. Puedo decirte que, con solo estar en esa habitación, está sucediendo: el dolor que [Ellie] siente allí y esa rabia… No es algo calculado ni artificial. Fue difícil sentir que estábamos rompiendo algo que todos habíamos dedicado tanto tiempo a construir y a hacer funcionar con tanto cuidado", confesaba con pesar.
Por su parte, Neil Druckmann, cocreador de la serie, se mostraba muy orgulloso por la forma en que la ficción de Max ha plasmado este impactante instante. Reconoce que no era fácil de lograr, pero que todo el equipo lo hizo excepcionalmente. "Muchas veces las adaptaciones no pueden capturar el momento. Esta vez, me siento muy afortunado de que se haya logrado. Honestamente, conociendo cómo trabajan Pedro y Bella, nunca tuve duda y sabía que lo harían bien porque sé cómo hacen su trabajo y el esfuerzo que le dedican. El hecho de que la escena haya funcionado todavía dice mucho de la magia de estos increíbles actores", relataba emocionado.
Estas reflexiones revelan lo mucho que ha afectado a todo el equipo de The Last of Us la despedida de un personaje tan querido como Joel. En lo que no solo ha sido una secuencia de acción, sino un momento que ha tocado la fibra del público y de todos los involucrados, convirtiéndose en una de las escenas más significativas tanto en la historia de la serie como en la experiencia de quienes la hicieron realidad.