Marc Bartra y Melissa Jiménez comenzaron a hacer vidas en viviendas separadas a principios del mes de noviembre, tal y como informa la revista ¡HOLA! de esta semana que añade que ya han firmado su acuerdo de separación en el notario. La pareja ha puesto fin así a cinco años de matrimonio en el que formaron una numerosa familia con tres hijos, Gala, Abril y Max, una historia de amor que ha finalizado, como deslizan fuentes cercanas a ¡HOLA!, por el desgaste de la relación. El futbolista, que milita actualmente en el Betis, y la periodista se casaban ilusionados después de tres años de relación el 18 de junio de 2017, un enlace que llegaba tras el nacimiento de su primera hija en común, Gala (18 de agosto de 2015).
Melissa Jiménez, una novia romántica y moderna
La involuntaria y divertida 'cobra' de Marc Bartra a Melissa Jiménez en su boda
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El escenario elegido fue la finca Bell Recó de Argentona, un entorno rodeado de naturaleza en el que los novios brindaron con compañeros de Marc vinculados con el Barça, club en el que jugó hasta el 2016 (en aquellos momentos jugaba en el Borussia Dormunt), como Carles Puyol, Xavi Hernández, Jordi Alba, Sergio Busquet y Thiago Alcántara acompañados por sus respectivas parejas: Vanesa Lonrenzo, Núria Cunillera, Romarey Ventura, Elena Galera y Julia Vigas. También asistieron algunas compañeras de profesión de Melissa, como las periodistas Lucía Villalón y Nira Juanco, y los hermanos Aleix y Pol Espargaró con sus parejas.
Melissa caminó hasta el altar con un romántico diseño de Rosa Clará, que combinaba un sugerente y delicado cuerpo de encaje francés bordado a mano en pedrería con sutiles transparencias, y con una vaporosa falda para la que se han utilizado 40 metros de tul de seda. El cuerpo tenía un pronunciado escote en la espalda. El look de la novia se completó con un delicado velo de tres metros realizado en tul de seda natural y acabado con una onda del mismo encaje que el cuerpo del vestido, además de las joyas que la firma Suárez diseñó especialmente para este día.
Una celebración de dos días
La noche anterior ya habían comenzado las celebraciones con una fiesta preboda en Barcelona, donde Melissa también apostó por la elegancia y la frescura de Rosa Clará. Lució un vestido femenino y sensual en el que se mezclaban encaje y chantillí francés, con un cuerpo con un sugerente y profundo escote en forma de corazón y la espalda con un vertiginoso escote que estilizaba su figura. La falda, tenía una gran apertura acabada con ondas de encaje.
“Sí quiero. Sí quiero besarte, abrazarte, bailarte, sonreírte, quererte, amarte, vivirte, adorarte, sumarte, divertirte, arroparte, sorprenderte, soñarte... y todo eso, todos y cada uno de los días y momentos que nos quedan por vivir en nuestra historia. La que empezó ayer junto a todas y cada una de las personas que queremos tanto y que hicieron que ayer fuera nuestro sueño más real. Gracias a todos por formar parte de nuestra historia, ¡sois increíbles! T’estimo vida meva (Te quiero mi vida)” escribía Marc horas después de dar el sí a Melissa. La novia agradecía también la asistencia de amigos y familia a esta ocasión tan significativa. “Érase una vez... vas a llegar a mi vida para quedarte. Gracias amor por dejarme ser la princesa de tu cuento, por hacerme feliz desde el primer día que te conocí. Gracias a todos los invitados por querernos y estar presentes en el día más emotivo de nuestras vidas. Gracias a los que me han ayudado estos meses, que han trabajado para que todo saliera perfecto. Gracias Rosa Clará –diseñó su vestido- por hacerme brillar como nunca. Estoy feliz. Gracias”.
