El mundo del toro ha vivido unas horas de mucha incertidumbre tras lo sucedido este domingo en la Paza de Toros de Abarán, en Murcia. Paco Ureña sufrió una grave cogida en el sexto astado de la tarde y tuvo que ser trasladado en ambulancia al Hospital Virgen de la Arrixaca de Murcia, donde se encuentra recuperándose. Según el último parte médico, el diestro, de 38 años, tiene una fuerte contusión en el esternón, un traumatismo craneal, una fractura en la vértebra C4, aunque sin desplazamiento, y un esguince en la rodilla derecha. Así lo han determinado las pruebas a las que ha sido sometido Ureña, que seguirá unas horas más en observación.
Junto a él está en todo momento su mujer, Elena González, quien se encontraba en la plaza cuando sucedió todo. La hija del recordado Dámaso González está embarazada de seis meses y vivió momentos de mucha tensión y nerviosismo al ver la grave cogida de su marido. En las últimas horas no se ha separado de su lado en el hospital y está a la espera de saber cómo será su recuperación, que previsiblemente se alargará varios meses. Como siempre, la familia González se ha mostrado muy unida y están pendientes de la evolución del torero.
Marta González ha querido dar las gracias por todo el apoyo y los mensajes que están recibiendo, al igual que su hermana Sonia, que ha publicado: "Hoy solo puedo dar gracias a Dios porque mi cuñado @paco.urenaoficial se va a recuperar. Mi admiración por cómo respeta y ama la profesión que mi padre nos transmitió llena de valores y también de miedos y sufrimiento, que compartimos los que la vivimos día a dia". "Mi amor para mi hermana @elenagdetroya y mi @urena946 y ahora con todo nuestro corazón e ilusión en la princesa que viene de camino", ha dicho haciendo referencia a la bebé que viene en camino.
Un "milagro"
"Anoche le detectaron una lesión que se ha confirmado esta mañana en la cuarta vértebra de la columna. Gracias a Dios está rota, pero sin desplazamiento; si no, hubiese sido una lesión muy grave", ha dicho al portal Cultoro Juanvi de la Calle, el mozo de espadas del torero murciano. "Al ser una rotura limpia, la vértebra soldará. Y esto es una gran noticia, porque tendrá que estar mínimo dos meses con collarín y reposo absoluto, pero no significa un desplazamiento de la vértebra, lo que hubiese producido quizá daños irreparables", ha contado después de hablar con el doctor que le está atendiendo, Ricardo Robles. Paco Ureña ha permanecido toda la noche en observación también por el fuerte golpe que recibió en el esternón, a pocos milímetros del corazón. "La fortuna hizo que Paco agarrase el pitón con su mano y se lo quitase de encima. Si no, podría haber presionado la zona del corazón". De hecho, muchos medios taurinos lo han calificado como "un milagro".
