Michael Gargiulo, el conocido como el "Hollywood Ripper" (el destripador de Hollywood), ha sido condenado a muerte por el tribunal en el estado de California por haber agredido brutalmente a una mujer y asesinado a otras dos en el área de Los Ángeles entre 2001 y 2008. Una de las víctimas de este criminal se veía entonces con el actor Ashton Kutcher y habían quedado precisamente la noche en la que se cometió el crimen. El jurado declaró al acusado culpable hace ya dos años, pero las circunstancias sanitarias han retrasado hasta ahora el anuncio de la sentencia. El propio Kutcher compareció como testigo en el juicio celebrado en 2019, recordando lo ocurrido aquella terrible noche de 2001 en la que llegó tarde a recoger a la joven Ahsley Ellerin.
Ashton Kutcher testifica en el juicio del supuesto asesino de su exnovia
El 21 de febrero de aquel año, Ashley, bailarina y estudiante de diseño de 22 años, tenía planeado asistir a una fiesta de los Grammy con Ashton Kutcher, que por entonces era una estrella gracias a la serie Aquellos maravillosos 70. Ashton explicó que llegó tarde a recogerla y que estuvo llamando a su puerta sin saber que ya había sido asesinada. "Llamé a la puerta y nadie respondió", explicó el actor. "Volví a llamar un par de veces y seguía sin obtener respuesta. Pensé que se había ido, porque yo había llegado tarde, y estaría enfadada", declaró. Llegó a asomarse por la ventana y vio una mancha de sangre en el suelo que confundió con vino tinto. Nunca imaginó una tragedia semejante como la que encontró una compañera de piso de la fallecida al día siguiente: Ashley había sido apuñalada 47 veces cuando, según publicó el Washington Post, se estaba preparando para su cita con el actor.
Un juicio pendiente
Ashton contó que la joven y él se conocieron en una fiesta de cumpleaños en diciembre de 2000, en aquella época él tenía pareja, así que se la presentó a un amigo. En febrero de 2001, cuando se volvieron a ver, ya estaba soltero, así que decidieron ir juntos al after party de los Grammy, algo que finalmente no llegó a ocurrir. Después de revelarse el crimen, uno de los amigos de Ashley comentó a la policía que Gargiulo se presentó en más de una ocasión en casa de ella sin ser invitado, y otro compañero aseguró que algún día llegó a ver al acusado frente al domicilio de la víctima vigilando desde su coche.
En 2005, Gargiulo acabó con la vida de Maria Bruno, de 32 años, y en 2008 trató de cometer un nuevo crimen con Michelle Murphy, pero por suerte esta pudo escapar de su apartamento. El ADN que hallaron en su cuerpo permitió confirmar que su agresor fue Gargiulo. A este se le ha atribuido además el asesinato de Tricia Pacaccio, una joven de 18 años, en 1993. En este caso, el juicio está todavía pendiente en el estado de Illinois. El condenado ha defendido siempre su inocencia ante el tribunal.
