Todavía quedan unas semanas para que termine el verano y muchos rostros conocidos están apurando hasta el último momento. Es el caso de Pepe Rodríguez, al que hemos visto pasando unos días de vacaciones en Marbella acompañado de su mujer, Mariví, y sus tres hijos María, Jesús y la pequeña Manuela. Todos llevaban mascarilla, siguiendo las medidas de protección contra el coronavirus, y aprovecharon para disfrutar del buen tiempo por el paseo marítimo. Tal y como puede verse en las imágenes, el juez del programa MasterChef llevaba un look informal, cambiando el delantal por una camiseta blanca y pantalones negros, mientras que su mujer se decantaba por un elegante vestido de rayas y gafas de sol estilo retro.
El reconocido chef está descansando y recargando pilas antes de volver a ponerse al frente de su restaurante El Bohío, ubicado en la localidad toledana de Illescas y premiado con una estrella Michelin, que se ha convertido en uno de los templos de cocina de vanguardia más importante de nuestro país. "Así nos hemos quedado sabiendo que el domingo por la tarde estaremos una semana cerrados. ¡Volvemos en septiembre con más ganas! ¡Que lo paséis muy bien!", escribió en sus redes sociales el pasado 21 de agosto.
Y es que durante estos últimos años, Pepe se ha convertido en uno de los rostros más populares de la pequeña pantalla. "Cuando me llamaron para ser juez estaba pasando el momento más crítico de mi vida. No sabía si seguir o no con El Bohío. Hoy, ocho años después, acabo de reformarlo y tiene más salud que nunca. Así que solo puedo corroborarlo: MasterChef cambia vidas", reconoció hace unos meses. Junto con su hermano Diego (jefe de sala) constituye la tercera generación del restaurante manchego. Fue su abuela Valentina quien fundó el local con la ayuda de su hermana. Después llegó su padre, Diego, y luego él. Aprendió de los grandes, entre ellos Martín Berasategui y Ferrán Adriá, con los que ha vuelto a coincidir en el plató de MasterChef en los últimos años.
Eso sí, cuando se apagan los focos, tiene en casa a sus mayores apoyos. Mariví, su novia de toda la vida, hacía referencia a cómo se conocieron en la última edición de MasterChef Junior, asegurando que: "Le conocí en un bar que tiene él. Yo venía de jugar al tenis con unas amigas y dijimos de tomarnos una Coca Cola y él estaba ahí... Me fichó y cada vez que iba a Illescas ahí estaba él, esperándome". Respecto a qué es lo que le enamoró de su marido, explicó que es una persona "muy elegante, es un señor. Y luego su cocina, eso me enamoró", dijo sobre el dueño de El Bohío.
- El momento agridulce de Pepe Rodríguez al volver a su restaurante tras la cuarentena
Reencuentro con amigos
Durante estos días, el jurado de MasterChef ha disfrutado de su familia pero además se ha reencontrado con algunos amigos y compañeros de profesión. "¡También es mala suerte salir de cena y encontrarte con lo mejorcito de cada casa! ¡Cómo lo hemos pasado! Gracias a @danigarcia7 @qiqedacosta @jordicruzoficial Cómo se bebe y se come en @lenadanigarcia Qué maravilla de sitio y de concepto", ha publicado en su cuenta personal junto a esta imagen que ha recibido muchos comentarios. "¡Vaya grupito!", ha dicho Patricia Montero, mientras que Bibiana Fernández ha escrito: "Casi ná". También le ha comentado El Monaguillo: "¡Qué mala suerte, tío!".
