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Tras el enlace religioso que tuvo lugar este sábado en la abadía Sainte-Marie de Pierredon, en la comuna francesa de Saint-Rémy-de-Provence, Carlota Casiraghi y Dimitri Rassam pusieron el broche de oro al fin de semana con una gran fiesta temática que celebraron el domingo con algunos de sus amigos más cercanos. Con aires zíngaros pero también de feria y flamenco, los looks de los invitados están llenos de lunares, volantes, flecos, flores y abanicos. Entre ellos no faltaron los españoles Aldo Comas y Macarena García, buenos amigos de la familia Casiraghi, que han compartido la imagen de su look con sus seguidores un día después de la celebración.
Aldo Comas, que vestía camisa de lunares, chaleco y sombrero cordobés, un total look de Avellaneda, fue al internado suizo Collège Alpin Beau Soleil cuando era joven, donde forjó una amistad con los hermanos Casiraghi. No es la primera vez que le vemos en esta clase de eventos puesto que ya en 2015 organizó la despedida de soltero de Pierre, hijo pequeño de la princesa Carolina de Mónaco, en el castillo de Requesens, en Girona.
Aldo y Macarena fueron los únicos españoles, junto a Alejandra Rojas, invitados a la boda blanca en Gstaad de Andrea Casiraghi y Tatiana Santo Domingo en invierno de 2014. Y en 2015 se unieron a Pierre Casiraghi y Beatrice Borromeo en la noche mallorquina, donde acudieron juntos a la tradicional Cena de Armadores en el Real Club Náutico de Palma de Mallorca. Un año más tarde estuvieron también en la segunda boda del hermano de Tatiana Santo Domingo, que fue de disfraces.
Entre los invitados a esta fiesta temática de Carlota Casiraghi y Dimitri Rassam ha habido gente de muchas nacionalidades. No han faltado la modelo italiana Bianca Balti, que acudió con su marido Matthew McRae, y Concepción Cochrane Blaquier, socialité y diseñadora argentina. Ambos han presumido de sus estilismos en sus redes sociales dándonos a conocer un poco más sobre cómo fue la celebración.
A pesar de la discreción con la que han querido celebrar su enlace los novios, ha sido inevitable que las redes sociales filtrasen algunos detalles tanto de la celebración que tuvo lugar tras la ceremonia religiosa en la propiedad que Carolina de Mónaco tiene en este municipio de la Costa Azul francesa, como de esta fiesta con la que culminaron los festejos al día siguiente. Aunque no hemos podido ver a muchos invitados, sabemos que el dress-code para este evento pedía vestir un estilo bohemio y zíngaro, tal y como rezaba en las invitaciones, en las que ya se adelantaba la temática con el encabezado: "os osperamos para una feria" que comenzó a las 14h y estaba previsto que finalizase al final de la noche.
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