Tras anunciar la semana pasada que no participaría en el Masters 1.000 de París, Rafa Nadal ha querido sincerarse a través de sus redes sociales y revelar que hoy mismo ha sido operado del tobillo. De esta forma, el tenista mallorquín, que cedía el número 1 a Novak Djokovic, se despide de la temporada para centrarse en su recuperación. "Hola a todos: Os escribo estas palabras como final de temporada. Ha sido un año complicado, muy bueno a nivel tenístico cuando he podido jugar y a su vez muy malo en lo que a lesiones se refiere. He hecho todo lo posible para llegar a final de temporada en buenas condiciones, tanto a París como a Londres, haciendo las cosas bien y me apetecía mucho jugar. Desafortunadamente tuve el problema del abdominal en París la semana pasada y, además, tengo un cuerpo libre en la articulación del tobillo que tiene que ser removido en quirófano hoy", escribía.
"Es cierto que lo teníamos detectado desde hace tiempo y, de vez en cuando, me molestaba. Sin embargo dado que el problema en el músculo abdominal me impide también jugar en Londres, aprovechamos el momento para remover el cuerpo libre y evitar futuros problemas. De esta manera espero estar en plenas condiciones para la próxima temporada. Gracias a todos por el apoyo", añadía confesando así que se trataba de una lesión que ha ido arrastrando en el último tiempo.
A pesar de que el español no volverá a jugar en lo que queda de 2018 y garantiza así el número 1 al serbio, Rafa cierra este año con cinco importantes trofeos, incluido su histórico undécimo Roland Garros. A este se une el Masters 1.000 de Canadá, Roma y Montecarlo así como el torneo de Barcelona.
En esta recuperación, Rafa volverá a contar con el gran apoyo de su pareja, Meri Perelló. Trece años juntos consolidan un noviazgo que, a día de hoy, sigue más sólido que nunca. Celosos de su privacidad, lo cierto es que nunca han podido ocultarse del todo, pero su saber estar les ha convertido en una de las parejas más estables del panorama deportivo. Y a ella, en una mujer en la sombra que prefiere mantenerse al margen de los éxitos de Nadal, aunque siempre los celebra con él. De ahí que sea a Meri a quien van dirigidas cada una de las victorias del balear, pese a que no la mencione en los agradecimientos.
