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Mario Vargas Llosa ha sufrido una caída en su domicilio y permanece en observación en la clínica Rúber de la céntrica calle de Juan Bravo, en Madrid, según ha podido saber HOLA.com. El premio Nobel no tiene ninguna fractura, pero sí un hematoma en la región glútea izquierda y un leve traumatismo craneoencefálico. El ingreso se producía esta misma mañana, justo depués de su viaje a Canarias. El pasado lunes, el escritor peruano, de 82 años, estuvo con Isabel Preysler en el Observatorio del Roque de Los Muchachos, de La Palma. Una visita organizada por el Instituto de Astrofísica de Canarias, que invita a figuras de la literatura hispana a conocer el día a día del personal científico-técnico del centro.
"Ha sido una visita breve, pero de enorme significación e importancia para mí y estoy seguro de que también para Isabel, que me ha acompañado en este viaje. Era la primera vez que venía a La Palma y espero que no sea la última”, declaró Vargas Llosa en la rueda de prensa que el escritor, junto con el director del IAC, Rafael Rebolo, concedió el martes por la tarde en el hotel La Hacienda de Abajo, del municipio palmero de Tazacorte.
A mediados de mayo, Mario e Isabel viajaron a Miami para asistir al concierto de Julio Iglesias Jr. A partir de ahí, hemos visto al escritor en una tertulia organizada conjuntamente por la Fundación Ramón Areces y la Fundación Deliberar junto a Fernando Savater. El 16 de junio, acompañó al líder de Ciudadanos, Albert Rivera, a un acto celebrado en Málaga, donde pronunció las siguientes palabras: “La unidad española, forjada a lo largo de tantas aventuras y tantos cientos de años, no la van a romper los grupos independentistas que quisieran destruir lo que ha sido forjado con el esfuerzo de tantos españoles y españolas a lo largo de los siglos".
Isabel Preysler conoció al premio Nobel de Literatura en julio de 1986, cuando le hizo una entrevista para la revista ¡HOLA!. En ese momento entablaron una buena amistad que con el paso del tiempo se convirtió en una relación de pareja. Desde 2015, han recorrido el mundo de la mano respondiendo así a la eterna pregunta sobre su boda. "Si llegase a ocurrir una boda entre Mario y yo, sería algo muy íntimo y muy discreto. Pero ya me siento casada y él siente lo mismo. Para nosotros no es importante firmar un contrato, no lo necesitamos", aclaró Isabel en ¡HOLA!.
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