Han pasado dieciocho meses desde que el mundo dejase de creer un poco más en el amor después de que Angelina Jolie y Brad Pitt anunciasen su ruptura. La pareja perfecta de Hollywood se separaba tras más de una década juntos y seis hijos en común y, aunque hubo unos meses en los que se habló de una posible reconciliación, lo cierto es que el paso definitivo, el divorcio, podría estar cada vez más cerca. Según The Sun, los actores habrían llegado a un acuerdo y los abogados de ambos se habrían puesto manos a la obra para que la firma llegase cuanto antes. "Los términos del divorcio están ahora claros. Ahora ambos equipos legales están redactado el documento. Es un gran cambio, especialmente teniendo en cuenta las afirmaciones que Angelina hizo contra Brad. Ambos decidieron que era crucial para los niños que tuvieran una relación respetuosa", ha revelado una fuente cercana a la pareja al diario británico.
Un acuerdo que, sin embargo, no habría hecho que la relación entre ambos intérpretes mejorase. "La gente dice que se van a volver, pero nunca sucederá. Las cosas entre Brad y Angie terminaron realmente mal y, aunque han intentado la terapia con los niños, no pueden estar juntos en la misma habitación", confesaba la misma fuente.
Angelina y Brad, que son padres de Maddox, de 16 años; Zahara, de 13; Pax, de 14; Shiloh, de 11 y los gemelos Knox y Vivienne, de 9, no han rehecho su vida en todo este tiempo a pesar de los constantes rumores que relacionan a uno y otro con diferentes personas. De hecho, para los actores sus hijos son lo más importante y, prueba de ello, es este nuevo paso que ambos han decidido dar. Un amor incondicional por ellos que la actriz y directora ha mostrado en una entrevista exclusiva para la revista ¡HOLA!, que está a la venta en tu quiosco habitual.
El protagonista de Aliados ya reveló hace unos meses en una entrevista para GQ que su problema con la bebida jugó un papel crucial en su divorcio de la actriz. “Dejé todo menos la bebida cuando formé una familia (...) Estaba bebiendo mucho. Se convirtió en un problema” aseguró entonces a la vez que admitió que tras luchar contra ello lo había vencido. “No quería vivir así más. Empecé a ir a terapia. Fui a dos terapeutas hasta encontrar al adecuado”, comentó sobre cómo lo había dejado. Además, admitió que, debido a su trabajo, pasaba mucho tiempo alejado de sus hijos. “Lo digo como alguien que ha dejado que su trabajo le absorba. Los niños son delicados. Necesitan que les cojas de la mano y que les expliques las cosas. Necesitan que les escuches. Cuando estaba tan ocupado con el trabajo, no escuchaba. Quiero ser mejor en eso”, admitía.
