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Su papel de Brianna Randall en el final de la segunda y principio de la tercera temporada de la serie Outlander ha supuesto un auténtico espaldarazo en la carrera profesional de la joven Sophie Skelton. La gran fortuna de formar parte del elenco de una de las ficciones más exitosas de la actualidad a nivel mundial ha contribuido a que su (hasta ahora) corta carrera viva uno de sus momentos más álgidos.
Su discreta carrera, que comienza en el año 2008 como actriz de teatro, ha firmado pequeños papeles en series de televisión y discretas colaboraciones en la gran pantalla como su papel de Zoe Parker en Day of the Dead (2017). Sin embargo, en la actualidad, su nombre es uno de los más buscados por los fans de la popular serie de Startz que narra la increíble historia de una enfermera de combate en la Segunda Guerra Mundial que viaja en el tiempo.
Su juventud y su encanto natural han contribuido, junto con su importante papel en la ficción, a que numerosos medios de moda y firmas de estilo de vida se hayan interesado en Sophie como un nuevo reclamo publicitario. Sin ir más lejos, la última entrevista concedida por la actriz de 23 años a una conocida publicación especializada en tendencias parece ser el pistoletazo de salida, como ha sucedido con el resto de sus compañeros de trabajo, del nacimiento de una nueva ‘it’.
Vestida con firmas como Oscar de la Renta, Calvin Klein o Dior, Sophie sigue los pasos de actrices como Emma Watson, Rachel Bison o Evangeline Lilly quienes, gracias a su éxito como actrices, se convirtieron en auténticas creadoras de tendencia.
Consciente de la gran repercusión que está generando tanto la serie como su participación en la misma, Sophie ha confesado sentirse lago abrumada por la gran aceptación de su papel, tanto en lo referente a los millones de fans que aglutina como por los niveles de popularidad que ha alcanzado en un tiempo récord, una realidad que, como confesaba a Harper’s Bazar, está digiriendo poco a poco.
Al igual que sucede con Sam Heughan o Caitriona Balfe, Sophie es muy activa en las redes sociales y en su perfil de Instagram se mezclan a partes iguales instantáneas de su vida personal con fotografías de la promoción de Outlander. Sus cenas con amigas, los juegos con su mascota o algunas de sus reuniones familiares, comparten espacio en su ‘timeline’ con las instantáneas del cartel promocional de la serie o especiales instantes con sus compañeros de reparto. Una doble realidad que parece hacer las delicias de sus más de 30.000 seguidores, un número que inevitablemente sigue creciendo. ¿Ha nacido una estrella?
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